El padre del defensa, György Garics Sr, falleció el viernes por las complicaciones de un cáncer en su casa de Hungría, donde también nació su hijo. Garics afirmó que él hubiese querido que permaneciese en el torneo para enfrentarse a su Hungría natal este martes en su primer partido en el Grupo F.
"Conseguí hablar con él por teléfono. Ahora voy a tratar de hacer mi parte para ayudar al equipo, él lo hubiera querido así. Voy a tratar de reunir un poco de fuerza en esta triste historia. Siempre quiso lo mejor para mí y para mi carrera. Sus últimas palabras fueron 'Por favor, vete y haz lo que tienes que hacer'", reconoció en la web de la Federación Austriaca de Fútbol.
El defensa del Darmstadt 98 de la Bundesliga alemana, de 32 años, aseguró que el partido entre Austria y Hungría de este martes tendrá un significado especial tras la muerte de su padre. "Su mayor alegría fue que yo viniese a la Eurocopa. Quiero preparar un hermoso homenaje para él", concluyó.