Pasaban poco más de 50 segundos desde el pitido inicial cuando el francés Benoît Trémoulinas colgó un balón que tras tocar en la espalda de Iborra quedó muerto dentro del área y no desaprovechó su compatriota Kevin Gameiro. El tanto del galo fue el único de una primera parte plagada de ocasiones para ambos equipos.
El cuadro de Unai Emery tuvo que aguardar hasta el comienzo de la segunda mitad para incrementar distancias; Gameiro recogió un rechazo y asistió a Iborra, que anotó a puerta vacía su tercer gol en Liga (min.47).
Sin embargo, Guiseppe Rossi, que la semana pasada debutaba con la camiseta granota, salió al rescate de los de Rubi tras una buena presión de su equipo que provocó la pérdida del balón de Cristóforo; el italiano armó un disparo lejano que no acertó a blocar Sergio Rico y que se fue al fondo de las mallas (min.56).
Los nervionenses repararon su error y en el minuto 76, con un zapatazo de Konoplyanka a la escuadra imparable para Mariño, sentenciaron la contienda. De esta manera, los sevillistas (36) alcanzan puestos europeos, mientras que el Levante se mantiene último con 17 puntos.