Tras la presencia de Rosell en la manifestación por la independencia de Cataluña, a título personal, quiso dejar claro que el Barcelona es "más que un club". "La institución siempre será fiel a su historia y a sus convicciones. Siempre defenderemos el derecho de los pueblos a decidir su futuro. Siempre nos hemos abierto al mundo pero queremos que nos entiendan y nos acepten tal como somos, catalanes", indicó.
Además, el presidente Rosell fue respaldado por el auditorio, que aplaudió a rabiar cuando explicó que el Barça es "un club catalán y catalanista que está orgulloso de su pasado". "Un club que está orgulloso de su historia y de las personas que con su lucha y dedicación han construido nuestro presente y los pilares del futuro", manifestó.
Por su parte, el presidente del Barça se refirió al sentimiento de pertenencia a "un club que tiene principios, compromiso y valores, un club que tiene la humildad necesaria para saber ganar y saber perder, un club que tiene a los mejores jugadores del planeta, la fuerza de los cuales les permite superar momentos difíciles dentro del vestuario y celebrar como grupo los reconocimientos individuales", indicó.