El de Camas llega con muchas ganas a esta cuarta jornada de Liga ya que el Real Madrid juega ante el Sevilla equipo que le vio crecer y formarse como futbolista. "Siempre que uno vuelve a casa es una alegría tremenda, y no sólo porque vuelvo a estar con mi familia y mi gente, sino porque el Sánchez Pizjuán es un campo que me ha dado mucho. Me ha visto crecer y me ha formado también en mis primeros años como persona y futbolista", confesó el madridista en declaraciones facilitadas por 'bwin'.
"Siempre que mi equipo juega apuesto por la victoria, y es que nosotros estamos obligados siempre a salir, sea donde sea, a ganar", aclaró el central, quien no bajará el ritmo en el partido por el hecho de jugar contra su exequipo.
El defensa, tras ocho temporadas en el Real Madrid, ya es todo un símbolo del club y trabaja para convertirse en una leyenda del madridismo. "Ojalá, el día de mañana, mi nombre pueda perdurar en la historia de un club tan grande como el Real Madrid, como en el caso de Raúl, Pirri, Camacho o Di Stéfano", comentó.
"Me gustaría seguir consagrándome en mi puesto como central y seguir manteniendo el buen nivel de estos dos últimos años, además de poder seguir añadiendo títulos a mi palmarés, que es lo que perdura en el tiempo, al final de año", finalizó el central.