Stofile ha asegurado en Pretoria que su Ministerio pedirá a científicos sudafricanos que hagan sus propias pruebas a Semenya, que según medios internacionales sería hermafrodita y podría verse excluida de la competición femenina por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF). Ha dicho a los periodistas que, si la IAAF suspende a Semenya, "será la tercera guerra mundial".
"Iremos a los más altos niveles a rebatir la (eventual) decisión. Sería totalmente improcedente e injusto", añadió.
La IAAF no es partidaria de quitar a Semenya la medalla de oro obtenida en los pasados Campeonatos del Mundo de Altelismo de Berlín pero, de confirmarse que su nivel de testosterona le da una ventaja sobre sus rivales, no tendría más remedio que prohibir su participación en futuras pruebas. No obstante ha asegurado que no habrá un adecisión sobre este caso antes del próximo mes de noviembre. Este organismo ha rechazado hacer ningún comentario oficial sobre esta noticia hasta que los resultados de las pruebas sean verificados por un equipo de expertos y sea informada la propia atleta.
Por su parte, el presidente sudafricano, Jacob Zuma, se pregunta por qué en el caso de Semenya "no se ha respetado el secreto entre médico y paciente". "Tenemos una chica que ha competido y ganado", dijo Zuma, antes de agregar que el caso de la atleta "es una situación desafortunada" y que "no se debe jugar con la vida y la intimidad de la gente".
"Desagradable y poco ético"
El departamento de Stofile ha consultado con abogados respecto a la supuesta violación de los Derechos Humanos de Semenya y el ministro dijo que está "defraudado por la forma en que se ha manejado este asunto por quienes tienen intereses creados".
El hecho de que las pruebas de sexo, según varios medios internacionales, indiquen que Semenya es hermafrodita "no significa nada" para Stofile, quien recalcó que ella es "una chica" y apostilló: "No creo que sea una mujer. Ella es sólo una niña. Yo creo que es una niña que disfruta de su crecimiento". "Han indicado que es hermafrodita, pero para mí eso no significa nada", repitió Stofile, para quien el hecho de que se haya puesto en duda el sexo de la atleta es "desagradable y poco ético".
La atleta sudafricana, de 18 años, obtuvo la medalla de oro en 800 metros en agosto pasado, en el Campeonato del Mundo de Atletismo de Berlín.
"Muy afectada"
Winnie Mandela, parlamentaria del partido gobernante en Sudáfrica y ex esposa de Nelson Mandela, defendió en declaraciones a la prensa local a Semenya, de la que dijo que es una "heroína" deportiva y "víctima inocente" de la polémica que se ha generado sobre su sexo.
En declaraciones publicadas por el rotativo sudafricano "The Star", Winnie se mostró "muy afectada" por las noticias difundidas por varios medios, en las que se señala que Semenya, de 18 años de edad, es hermafrodita y que su organismo produce grandes cantidades de testosterona.
"La pobre niña es una víctima inocente de este asunto, que no depende de ella. Es responsabilidad de Sudáfrica apoyar a la niña y decirle al resto del mundo que sigue siendo una heroína", recalcó Winnie.
La ex mujer de Mandela también criticó a la revista sudafricana "You", por presentar, en su última edición, a Caster Semenya con un nuevo aspecto, con peinados y vestidos muy femeninos.
Para Winnie, el aspecto, muy distinto del habitual, que han dado a Semenya en la revista sudafricana es "una caricatura" de la atleta: "Es la broma más cruel que un ser humano puede infligir a otro", concluye.
La abuela de la atleta, Maphuthi Sekgale, ha declarado: "Como familia, no nos preocupa lo que se está diciendo de ella ni tampoco si volverá a correr internacionalmente pero siempre apoyaremos su talento para el atletismo".