Carlos Soria y el resto de la expedición, entre ellos el periodista Ignacio Tena, ha aterrizado en Katmandú, después de casi dos días desde que salió de Madrid, donde ha vuelto a tener un recibimiento "muy cariñoso" por parte de sus colaboradores en el país asiático antes de partir en un par de días hacia el campo base.
"Todos nos hemos puesto de muy buen humor nada más salir del aeropuerto. Tanto mis compañeros de la Expedición BBVA como los 'novatos' la gallega Sandra y el colombiano Mario -los empleados del banco que nos acompañarán durante un par de semanas- ya vemos que la aventura nos espera", comentó.
Soria dijo que la mejor noticia del día fue que temía subir los 8.167 metros del Dhaulagiri solo con la ayuda de su compañero 'Sito' Carcavilla y los sherpas, pero le han confirmado que, junto a la suya, habrá otra expedición que es bastante numerosa procedente de Estados Unidos.
"Eso sería excelente, porque, entre todos, podríamos colaborar, compartir el trabajo de instalar las cuerdas, y mantener con más facilidad la huella abierta aunque haya mucha nieve. Tengo ganas de conocer a los miembros de esa expedición. El Dhaulagiri seguirá siendo un hueso duro de roer, pero con más ayuda, siempre es más fácil mantener las ilusiones intactas", subrayó.