De acuerdo con la compañía automovilística, la certificación como Classic Partner implica una especialización máxima para varios miembros del equipo, que han de pasar previamente por unos cursos exhaustivos antes de ser reconocidos por Porsche para el desempeño de sus funciones.
Desde ahora, este centro dispone de dos mecánicos que cumplen estos requisitos, más un jefe de taller, un asesor técnico y un jefe de recambios.
Además, la exposición de este concesionario cuenta desde la semana pasada con un Classic Corner, un espacio en el que se exponen modelos pasados y donde se puede recibir información detallada para los asuntos relacionados con sus vehículos clásicos.
"Ser el primer Porsche Classic Partner de España es mucho más que una satisfacción, es un reto apasionante porque nuestros clientes son exigentes y nuestra labor es, simple y llanamente, estar a su altura", ha señalado el director gerente de Centro Porsche Barcelona, José Velasco.
Por su parte, el director general de Porsche Ibérica, Tomás Villén, ha destacado que la marca lleva años luchando por ofrecer precios cada vez más competitivos en sus restauraciones y ha querido desterrar la creencia de que realizar este tipo de trabajo en los centros de la marca es más caro que hacerlo en otras instalaciones.