Stellantis para de nuevo la producción de vehículos en sus plantas de Figueruelas y en Vigo por falta de microchips

Los trabajadores de las plantas de Vigo y de Figueruelas de Stellantis, obligados a parar la producción ante la falta de componentes
La cadena de montaje estará cerrada desde el 2 de septiembre hasta el 5 por la crisis de microchips
Taiwán, los chips semiconductores y las claves de este tenso y peligroso conflicto con China
La falta de componentes, de microchips, vuelve a afectar de lleno al sector automovilístico. Stellantis acaba de anunciar que vuelve a parar la producción de vehículos en sus plantas de Figueruelas (Zaragoza) y de Vigo (Galicia). Hacía apenas dos semanas que habían retomado la fabricación y hay preocupación entre los trabajadores.
“Solo en esta factoría de Vigo trabajan unas 7000 personas más todas las empresas auxiliares y, como pueden imaginar, la incertidumbre es máxima. En el primer semestre del año llegó a parar hasta 40 veces y en esta ocasión la cadena de montaje estará cerrada desde hoy hasta el próximo 5 de septiembre si no vuelven a haber cambios, aunque la crisis de microchips parece que no va a resolverse a corto plazo”, ha informado Yolanda Menadas desde Vigo para Informativos Telecinco.
Aumenta la demora en la entrega de coches
En Figueruelas, los 5 000 trabajadores de Stellantis acababan de reanudar el trabajo a las 06.00 horas, que es cuando empieza el primer turno del día después de que el pasado jueves por la noche se suspendiera la actividad por la carencia de suministros. "Lamentablemente --ha indicado Alonso-- la dirección de la multinacional nos ha comunicado que tendríamos que volver a parar desde el martes por la noche por la falta de componentes". Esta situación afecta a la producción de los tres modelos que fabrica Stellantis en las instalaciones de Figueruelas y que son los Corsa, C3 Aircross y Crossland.
Rubén Alonso ha explicado que hay áreas que pueden trabajar, como la de mantenimiento, pero la producción queda totalmente suspendida y atañe a la mayoría de los 5.000 trabajadores de la planta zaragozana.
Los trabajadores de Stellantis, según ha informado el presidente del comité de empresa, Rubén Alonso, a Europa Press, tienen un sistema de distribución irregular de la jornada, que les permite cierta flexibilidad interna con un máximo de 25 días, pero "hay compañeros que los han agotado y tendrán que acudir al ERTE", lo que les garantiza el 80 por ciento del salario.
También ha reconocido que estos paros sucesivos afectan al cliente que "está esperando a su coche y esto supone una mayor demora porque cuanto más tarde se fabrican más tarde se entrega".
“Además de Stellantis, hay otros grupos afectados. Volwswagen Navarra cerrará el próximo 2 de septiembre”, ha dicho Menadas.