La cara B del Black Friday: ruina para los pequeños comercios

  • Las cuotas de autónomos, el alquiler, la luz o los seguros sociales no admiten rebajas, el pequeño comercio se reivindica contra el Black Friday y el consumismo masivo

Un mes antes de la navidad llega el Black Friday, chollo para algunos y ruina para otros. Los más perjudicados, los pequeños comerciantes, que tienen que sufrir en plena campaña de navidad como las grandes marcas rebajan sus productos en una cantidad inasumible para ellos. Unos descuentos que desatan una ola de consumismo, con la que además muchos no están de acuerdo.

Una campaña que además de inasumible para el pequeño comercio es incompatible con su ética de negocio. Nos lo cuenta la propietaria de una pequeña empresa del sector textil, uno de los que más contamina en el mundo. “Al final lo que buscan es favorecer un tipo de consumo”, dice sobre las grandes marcas, firmas y franquicias, y añade que se hace de una manera “muy poco respetuosa y muy poco sostenible”.

“Se pueden permitir jugar con unos márgenes que al final no podemos competir y tampoco nos gusta”, dice esta comerciante. Otros pequeños comercios se ven obligados a sumarse al Black Friday, porque tienen el mismo tipo de producto, como en el caso de las zapaterías o de las pequeñas tiendas de ropa. En el caso de la ropa, un consumismo masivo, que le ha llevado a ser uno de los sectores más contaminantes y que deja detrás historias de vida muy duras.

Tiendas especializadas tampoco se pueden permitir este día, es el caso de Paragüería Leoz, en Bilbao. Lleva abierta desde 1933 y reivindica la idea de dar a la gente lo que necesita y cuando lo necesita, a un precio justo. La dueña de este mítico negocio se pregunta dónde está el engaño, porque con los descuentos que asumen las grandes marcas, el beneficio no varía, lo que hace dudar de hasta qué punto pagamos lo que compramos.

Otra pequeña empresaria del sector textil dice que ellos no se pueden permitir perder esos dos días, porque sus seguros, la cuota de autónomo, el alquiler o la luz no admiten rebajas. Reivindica la necesidad de fomentar otro tipo de consumo, que se compre cuando se necesite, que no se compre algo de usar o tirar o por lo barato que esté. Hay que tratar de “mejorar toda la cadena”, dice. Ya que sino, es inevitable, nos vamos a cargar el pequeño comercio.

Desde otro punto de vista lo ven los que han sido contratados para esta campaña, ya que la campaña de navidad se amplía para este día, por lo que incluye Black Friday, navidad y las rebajas. Un total de 200.000 contratos, aunque son de carácter temporal y a costa de que el pequeño comercio quede extinto.