Los Veintisiete aprueban ampliar la jornada máxima semanal a 65 horas

INFORMATIVOSTELECINCO.COM/AGENCIAS 10/06/2008 00:00

La reunión en la que se ha aprobado la directiva ha durado más de doce horas. Además de España, Bélgica, Chipre, Grecia y Hungría también se abstuvieron. También presentaron reservas Portugal y Malta. En cambio, Italia y Francia, que en anteriores debates se habían situado en el bando de España, dieron su visto bueno al texto.

Los Veintisiete deberán llegar ahora a un acuerdo en segunda lectura con el Parlamento Europeo, que tiene poder de decisión en esta materia. En primera lectura, los eurodiputados reclamaron la supresión de todas las excepciones a la jornada laboral de 48 horas semanales en un plazo de 3 años.

La directiva aprobada este martes, al sexto intento y tras cuatro años de negociaciones, establece que, como regla general, la semana de trabajo en la UE debe tener 48 horas como máximo. Sin embargo, se permitirá que, en virtud de acuerdos individuales, empresario y trabajador puedan alargar la jornada laboral hasta 60 horas semanales, calculadas como media durante un periodo de 3 meses, e incluso hasta 65 horas en el caso de guardias médicas. España reclamaba que estas excepciones a las 48 horas se eliminaran por completo tras un periodo transitorio.

Excepciones voluntarias

No obstante, se contemplan una serie de salvaguardas para garantizar que los trabajadores aceptan el 'opt-out' voluntariamente y no forzados por temor al despido. El empresario deberá obtener un consentimiento por escrito del trabajador para trabajar más de 48 horas. La validez del consentimiento no podrá ser superior a un año y será renovable. Además, se podrán incluso superar las 60 y las 65 horas laborales si hay un acuerdo entre los interlocutores sociales o si así lo establece el convenio colectivo.

Posición de España

El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, que dejó la reunión a las cinco de la tarde por tener que viajar a Ginebra, reclamó a la Eurocámara que "rectifique" esta norma en su segunda lectura por considerar que representa "una regresión en la agenda social". "Me ha sorprendido mucho que se hable de 65 horas laborales a la semana y se diga que además es un avance social. Es algo que a los ciudadanos y a las ciudadanas les va a costar entender y que lógicamente a mi tampoco me satisface", resaltó.