El selectivo S&P 500 cerró el mes con un avance del 6,88% y el índice compuesto del mercado Nasdaq ganó el 6,9%.
Las cuentas empresariales del pasado trimestre mantuvieron al mercado bursátil muy ocupado en la segunda mitad de este mes y numerosas compañías, además de aumentar beneficios, se mostraron optimistas respecto de las ganancias que prevén en el conjunto del ejercicio, lo que estimuló el apetito comprador en Wall Street.
En otro casos, los ingresos trimestrales quedaron por debajo de las expectativas, lo que avivó en algunas sesiones las dudas en torno al clima de negocio para la segunda mitad de este año.
Sin embargo, los inversores mostraron un notable ánimo comprador en la mayoría de las sesiones de julio, a pesar incluso de que datos puntuales relativos a la actividad en algunos sectores o acerca de la confianza de los consumidores apuntaron a una ralentización en el ritmo de recuperación de la economía y a una actitud más pesimista de los estadounidenses.
Los datos oficiales relativos al comportamiento del Producto Interior Bruto (PIB) de EE.UU. en el segundo trimestre, que se difundieron este viernes, y otros relativos a la confianza, no hicieron más que corroborar lo que apuntaron otras cifras recientes.
Los datos preliminares del Departamento de Comercio de EE.UU. reflejaron que la economía estadounidense avanzó entre abril y junio a un ritmo anual del 2,4%, una décima menos de lo que preveían los economistas, comparado con un crecimiento del 3,7% en el primer trimestre y del 5,6% en los últimos tres meses de 2009.
Durante la próxima semana se difundirán más datos relativos a la actividad en el sector manufacturero y de los servicios en julio y también acerca del empleo, algo que concitará sobremanera la atención del mercado bursátil.
Las cifras de peticiones nuevas de subsidios por desempleo que se difundieron el jueves reflejaron un descenso de 11.000 solicitudes la pasada semana respecto de la anterior, aunque la cifra de 457.000 que se registró se considera aún demasiado elevada como para sugerir una mejoría significativa en el mercado laboral estadounidense.
Otros cálculos de la Universidad de Michigan y de The Conference Board reflejaron una actitud más sombría de los consumidores en julio que el mes anterior, debido a expectativas menos favorables acerca de la economía y del empleo en los próximos meses.
La Reserva Federal (banco central) constató además en su "libro beige", que difundió el miércoles, que la actividad económica en la mayoría de las regiones en que divide a EE.UU. avanzó de forma modesta este mes, en tanto que en las de Atlanta y Chicago se ha ralentizado.
Con ese panorama de fondo, la euforia compradora en Wall Street se disipó un tanto durante esta última semana y los principales indicadores bursátiles cerraron el viernes con cortas variaciones respecto del día anterior.
El Dow Jones cedió el 0,01% (-1,22 puntos) y finalizó en 10.465,94 unidades, en tanto que el S&P 500 subió el 0,01% (0,07 puntos), a 1.101,60 puntos y el Nasdaq avanzó el 0,13% (3,01 puntos), a 2.254,70 puntos.
En Europa, las bolsas de Londres(-1,05%), Madrid (-1,5%), París (-0,24%), Milán (-0,36%) y Lisboa (-0,48%), tuvieron una jornada desfavorable, al contrario que la de Fráncfort (0,22%).
En Asia, los mercados de Tokio (-1,64%), Hong-Kong (-0,3%) y Shangai (-0,4%), entre otras, también cerraron con perdidas.
En el caso de América Latina, la bolsas de Sao Paulo (0,84%), de Santiago (0,16%) y de Colombia (0,66%) lograron ganancias, al contrario que las de México (-0,48%), Buenos Aires (-0,47%) y Caracas (-0,3%), entre otras.