Wall Street se pierde en la indecisión mientras caen las materias primas

AGENCIA EFE 04/01/2011 15:48

En cualquier caso, el Dow Jones de Industriales, la principal referencia de Wall Street, logró cerrar con un avance del 0,18% en esta segunda sesión de 2011, después de que el lunes ya subiera un 0,81% gracias al optimismo con el que en general los inversores parecen encarar este nuevo año.

Sin embargo, el S&P 500 bajó hoy un 0,13% y el Nasdaq un 0,38% en una sesión en la que se publicaron datos de ventas de automóviles en EE.UU. y en que se difundieron las actas de la última reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos, lo que mantuvo en ascuas a los inversores durante buena parte de la jornada.

Finalmente se conoció que el banco central estadounidense cree que "la recuperación económica continúa pero a un ritmo que es insuficiente para mantener bajo el desempleo".

La Reserva considera que el gasto de los hogares del país aumenta pero a un ritmo moderado, la inversión empresarial en equipos y software crece menos que a principios de año, las empresas siguen reacias a contratar gente y el sector inmobiliario continúa de capa caída.

Además, cree que la recuperación económica aún es vulnerable a potenciales amenazas externas, como las repercusiones de un posible agravamiento de los problemas de deuda soberana en Europa.

En el ámbito nacional, la autoridad monetaria considera potencialmente problemática la continuidad de los bajos precios del sector inmobiliario.

Ante ese escenario la Reserva defiende su plan para inyectar 600.000 millones de dólares en la economía de Estados Unidos hasta mediados de 2011 mediante la compra de bonos del Tesoro a un ritmo de 75.000 millones de dólares mensuales.

Estas observaciones fueron bien acogidas por los inversores, que tras conocerlas volvieron al mercado e hicieron que las caídas de los principales indicadores se redujeran y hasta se eliminaran en el caso del Dow Jones.

Sin embargo, hasta entonces los inversores parecían estar más pendientes de recoger los beneficios que durante el año pasado hicieron con sus apuestas en el mercado de materias primas, especialmente en valores refugio como los metales preciosos.

Así, los contratos de futuros de oro con vencimiento en febrero -los más negociados en esta segunda sesión del año- terminaron con su precio más reducido en tres semanas, después de bajar 44,10 dólares por onza (-3,2%) y finalizar a 1.378,80 dólares en la Bolsa Mercantil de Nueva York, donde registraron el mayor descenso porcentual en seis meses.

Este metal precioso vivió en 2010 un año de fuertes avances y en conjunto se encareció un 30% gracias a su atractivo como valor seguro en el que invertir cuando la incertidumbre o los malos resultados empañan otros mercados.

Algo parecido ocurrió con la plata, cuyos futuros con vencimiento en marzo se abarataron hoy en 1,61 dólares por onza, lo que supone un descenso del 5,4% que deja esos contratos a 29,50 dólares la onza.

El cobre también vivió un día de caídas y la cotización de los contratos con vencimiento en marzo, también los más negociados hoy, descendió en nueve centavos por libra, lo que supone un abaratamiento del 2% que dejó estos futuros en 4,36 dólares.

Este metal también abandonó con el descenso de hoy niveles históricos, ya que el lunes registró su cotización más alta, al cerrar a 4,45 dólares la libra, después de haber batido sus propios máximos durante varios días de la semana pasada, la última de 2010.

Los analistas coinciden en apuntar que el optimismo con el que los inversores han llegado al mercado en este comienzo de 2011 hace que opten por recoger beneficios de inversiones que tenían como seguras, con la confianza de que en este año no necesitarán meter sus fondos en valores refugio como las materias primas.

Esa misma impresión -al igual que el fortalecimiento relativo del dólar- contribuyó hoy a que la cotización del crudo de Texas bajara el 2,37% en la Bolsa Mercantil de Nueva York y registrara así su mayor caída porcentual desde noviembre.

Con ese descenso el "oro negro" cerró la sesión a 89,38 dólares por barril (159 litros), su precio más bajo en más de dos semanas, mientras que, en otros mercados, el dólar se fortalecía ante otras divisas como el euro, que se cambiaba por 1,3297 dólares, y la rentabilidad de los bonos de deuda a diez años ascendía hasta el 3,33%.