La cifra de negocio de la compañía alcanzó un total de 29.484 millones de dólares (23.216 millones de euros), un 3,2% menos, mientras que los pedidos recibidos sumaron 32.150 millones de dólares (25.315 millones de euros), un 11,2% más.
La facturación de la multinacional por la venta de sus productos experimentó un retroceso interanual del 3,9%, hasta 8.255 millones de dólares (6.500 millones de euros), mientras por la venta de servicios sumaron 1.568 millones de dólares (1.234 millones de euros), un 0,16% más.
En el tercer trimestre, ABB logró un beneficio atribuido de 734 millones de dólares (578 millones de euros), un 12% menos que un año antes, mientras su cifra de negocio bajó un 6,7%, hasta 9.823 millones de dólares (7.734 millones de euros).
Entre julio y septiembre, la compañía suiza recibió pedidos por importe de 11.225 millones de dólares (8.838 millones de euros), una cifra un 23,5% superior a la del mismo trimestre de 2013.
"Gestionaremos cuidadosamente los costes y los recursos de liquidez ante la creciente incertidumbre con respecto a las perspectivas a corto plazo para la economía global", indicó el consejero delegado de ABB, Ulrich Spiesshofer.