"Es el llamado crédito rápido, tan rápido y fácil de obtener como difícil de devolver, que en un importantísimo porcentaje de casos está detrás de las insolvencias familiares, que desembocan incluso en la pérdida de la vivienda familiar", ha explicado en un comunicado.
La Ley permite que las familias y particulares se acojan a procedimientos concursales para salvar su situación financiera. La Agencia Negociadora ha reclamado una modificación legal que castigue más a las entidades que provocaron el sobreendeudamiento por prestarlo "sin unos mínimos de rigor ".
De acuerdo con dicha reforma, el acreedor menos riguroso en el análisis del riesgo tendría que aceptar una quita mayor que aquel otro que haya acreditado procedimientos más adecuados a la hora de valorar la capacidad de reembolso de los créditos concedidos.
La Agencia estima que en un 50% de los casos en que el estrangulamiento financiero de una familia desemboca en un ejecución hipotecaria se había producido un sobreendeudamiento previo o simultáneo cuyo elevado coste impidió cumplir con sus compromisos de pago, según datos del Observatorio de la Financiación Familiar de Agencia Negociadora.