Así, el principal indicador del mercado español, el IBEX 35, subió 64,10 puntos, el 0,59 por ciento, hasta 10.913,20 puntos, mientras que en esta semana, marcada por el rescate de Portugal, que necesitará 80.000 millones de euros para equilibrar sus finanzas, y la decisión del Banco Central Europeo de subir los tipos de interés del 1 al 1,25 por ciento, la bolsa española avanzó el 1,71 por ciento.
En Europa, con el euro a 1,443 dólares, París ganó el 0,83 por ciento; Londres, el 0,81 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,71 por ciento; Milán, el 0,65 por ciento, y Fráncfort, el 0,4 por ciento.
El mercado nacional comenzó la jornada por encima de 10.900 puntos y con unas ganancias considerables, que rondaban el 1 por ciento.
El cierre neutro de Wall Street en la víspera, la subida del 1,85 por ciento de Tokio esta madrugada y el avance de las plazas europeas estimulaban el repunte del mercado nacional, que se apoyaba también en el alza del precio de las materias primas.
La cotización del barril de petróleo Brent se situaba en 124 dólares -precio de agosto de 2008-, mientras que el oro y la plata se cambiaban a 1.470 dólares y a más de 40 dólares la onza, respectivamente, máximos históricos.
Aunque los datos comerciales alemanes decepcionaban -el superávit de la balanza comercial bajaba en febrero el 4,7 por ciento, hasta 12.100 millones de euros- y los inversores estaban pendientes de la reunión extraordinaria del Eurogrupo -ministros de Economía de la zona euro- sobre Portugal, la cotización del euro empezaba el día en 1,44 dólares, nivel desconocido desde enero de 2010.
Que Francia recortara una décima su previsión de crecimiento para el primer trimestre, hasta el 0,7 por ciento, y que el Eurogrupo cifrara en 80.000 millones los fondos que requiere Portugal no inquietaron a la bolsa.
Hasta la apertura de Wall Street, que inició el día con ganancias moderadas, la bolsa española aguantó por encima de 10.900 puntos, pero el cambio de tendencia del mercado neoyorquino le situó bajo esa cota.
A pesar de que el petróleo se cambiaba a más de 125 dólares y de que las existencias empresariales en los Estados Unidos crecieron el 1 por ciento en febrero, Wall Street incurría en pérdidas y la bolsa oscilaba sobre el nivel de 10.900 puntos, sobre el que concluyó la sesión.
De los principales valores, la mayor subida correspondió hoy a Banco Santander, el 1,18 por ciento; Telefónica, el 1,08 por ciento; Repsol, el 1,07 por ciento, e Iberdrola, el 0,7 por ciento. Sólo bajó BBVA, el 0,35 por ciento.
En cuanto a la evolución semanal de estas empresas, el Banco Santander ganó el 2,98 por ciento; BBVA, el 1,92 por ciento; Telefónica, el 1,56 por ciento; Iberdrola, el 1,34 por ciento, y Repsol, el 0,45 por ciento.
Telecinco encabezó hoy las subidas del IBEX al ganar el 2,39 por ciento, seguida de Acciona, con un alza del 1,98 por ciento; Ferrovial, el 1,91 por ciento, e Indra, el 1,61 por ciento.
La mayor caída del IBEX correspondió a IAG, el 3,49 por ciento, por el alza del petróleo y el anuncio de que el Estado español venderá el 2,7 por ciento de su capital, en tanto que Abertis cayó el 1,56 por ciento y Red Eléctrica, el 1,55 por ciento, también por la desinversión estatal en la compañía.
En la semana destacó la subida de Sacyr, el 12,69 por ciento, al conocerse que el presidente de DISA, Demetrio Carceller, se ha convertido en el primer accionista de la constructora, mientras que la mayor caída correspondió a IAG, el 4,69 por ciento.
En el mercado continuo destacó el avance del 4,97 por ciento de Enel, mientras que la acción de Nyesa, que estuvo suspendida, encabezó las pérdidas al bajar el 7,36 por ciento después de que se rompiera un acuerdo entre el principal accionista de la inmobiliaria, Bartibás, y Corbis.
Poco antes del cierre del mercado de deuda la rentabilidad del bono español a diez años subía dos centésimas, hasta el 5,26 por ciento, mientras que el efectivo negociado en bolsa ascendía a 3.840 millones, de los que cerca de 1.800 millones los intermediaron inversores institucionales.