En total son 20 las poblaciones pesqueras que no sufren el exceso de pesca, una cifra que celebra la comisaria de Pesca, Maria Damanaki, porque en 2009 apenas cinco alcanzaban esta categoría.
Damanaki ha aprovechado estos resultados para recalcar a los Estados miembros la necesidad de negociar con celeridad la reforma de la Política Pesquera Común (PCP) que debería entrar en vigor en 2013.
"Hemos constatado avances hacia el fin de la sobreexplotación, pero debemos dar un paso más si queremos mantener estas mejoras a largo plazo, y adoptar la reforma de la PCP", ha dicho, a pocos días de que los ministros de Pesca de la UE se reúnan en Luxemburgo para tratar de acordar un enfoque general sobre la reforma pesquera, con la que abrir la negociación directa con el Parlamento Europeo.
Bruselas quiere poner fin a la sobrepesca en el horizonte de 2015 y por ello defiende que los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y cuotas que se permite a la flota cada año se basen en lo que dicen las evaluaciones científicas y no en decisiones políticas negociadas entre los países.
Los planes de gestión a largo plazo que se aplican a distintas pesquerías, el control de las cuotas y otras medidas para equilibrar los esfuerzos pesqueros han permitido, según la Comisión, frenar la sobrepesca de algunos recursos e, incluso, recuperar algunas poblaciones en 2012. Bruselas afirma que estas mejoras se traducirán este curso en al menos 135 millones d euros más de ingresos para el sector.
De acuerdo a los datos ofrecidos por el departamento que dirige Damanaki, además del gallo y del rape de aguas ibéricas, otras nueve especies ya no constan como sometidas a un exceso de pesca en distintas zonas del Atlántico noreste.
Es el caso del jurel en la zona occidental, del Mar Cantábrico al Mar del Norte septentrional; de la bacaladilla en todas las zonas; del lenguado en aguas del norte; del bacalao del Báltico y del arenque y la cigala del norte.
La Comisión destaca mejoras en especies para las que hay datos científicos y celebra que en el Atlántico nororiental y en las aguas próximas, las poblaciones sobreexplotadas pasaron de las 32 de 2005 (de un total de 34) a 18 en 2012 (de un total de 38), lo que representa una disminución del 94 % al 47 %.
En cuanto al Mediterráneo, hay datos suficientes para el 63 % de las poblaciones y, de ellas, el 80 % siguen sufriendo el exceso de capturas, según el Ejecutivo comunitario.