En concreto, los empresarios alemanes valoraron su presente situación en 111,4 puntos, algo por debajo de los 112 enteros del mes anterior, mientras que sus expectativas mejoraron nueve décimas, desde los 103,3 puntos hasta los 104,2 enteros.
El producto interior bruto (PIB) de Alemania experimentó en el segundo trimestre del año una expansión del 0,7% respecto a los tres meses anteriores, lo que permitió a la primera economía europea cerrar el primer semestre del año con un superávit de 8.500 millones de euros, lo que equivale a un saldo positivo del 0,6% del PIB.
No obstante, el Bundesbank señalaba este lunes que la economía alemana ha perdido impulso en el inicio del verano respecto a los meses anteriores, aunque espera que repunte en los próximos meses gracias a unas buenas expectativas de producción y exportaciones, así como por el alto nivel de confianza de los consumidores.
"La economía alemana no ha mantenido en el inicio del verano de 2013 el impulso de la primavera", aseguró la institución presidida por Jens Weidmann en su boletín mensual del mes de diciembre.