El mercado no considera suficiente el anuncio de rescate irlandés y castiga al parqué madrileño

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 22/11/2010 09:29

Los mayores descensos fueron para la banca: Banco Sabadell (-4,22%), Bankinter (-4,19%), Banco Santander (-4,03%), BBVA (-3,87%) y Banco Popular (-3%).

El selectivo abrió en positivo y por encima de los 10.300 puntos, pero a lo largo de la sesión invirtió la tendencia, llegando a situar su nivel mínimo en 9.969,10 puntos. Entre los mayores recortes también se situaron Abertis (-3,49%) y Mapfre (-3,54%).

El mercado no considera suficiente que Irlanda haya aceptado la ayuda de la UE y el FMI, que podría situarse entre 80.000 y 90.000 millones de euros, y pide que, además de concretarse los detalles del rescate, se adopten planes adicionales, según expertos consultados.

Los principales indicadores europeos, que a primera hora han acogido con entusiasmo el rescate, han ido perdiendo fuelle con el paso de las horas.

La tendencia bajista afectó a Francfort que, aunque a mediodía se mantenía en positivo, acabó cediendo un 0,31%.

La Bolsa de París cerró a la baja y su principal indicador, el CAC-40, cayó un 1,07% por ciento.

La Bolsa de Milán registraba una pérdida más abultada incluso que la de Portugal al dejarse un 1,93% frente al 1,36% del parqué luso.

Por su parte, la Bolsa de Valores de Londres, que también ha abierto con un incremento del 0,35%, ha acabado cerrando con una bajada del 0,91%.

Portugal marca distancias con Irlanda

Consciente de que es el siguiente en la lista de los especuladores, Portugal ha marcado distancias con Irlanda y subraya la buena salud de su banca y la determinación de reducir su abultado déficit fiscal.

Pero varios analistas financieros y medios económicos expresaron el temor de que los mercados aumenten la presión sobre Portugal, a pesar del optimismo del Gobierno, de la oposición conservadora, y de que la bolsa lusa subió mientras los intereses de la deuda bajaban con el anuncio del rescate irlandés.

En una declaración escrita, el ministro de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, se mostró confiado en que Lisboa saldrá de la crisis sin ayuda y alabó el plan europeo para Irlanda porque "alivia recelos, reduce la incertidumbre y refuerza la confianza de los mercados".

Ambos ministros, Teixeira y Amado, han sido muy cuidadosos en sus valoraciones después de que hace una semana causaran una conmoción en los mercados y en su país al mencionar, en entrevistas diferentes, el peligro de que también Portugal sea rescatado y la posibilidad de que salga del euro.

La sensación en los medios económicos de Lisboa era que el país ha quedado en primera fila bajo los focos de la especulación, que este mes llegó a disparar los intereses que penalizan su deuda soberana al 7,4%, aunque hoy estaban en torno a un punto porcentual menos.

En su nota, Teixeira recordó que el sistema bancario luso está "bien regulado, supervisado y capitalizado" y que el Gobierno tiene en marcha un plan para reducir el déficit y sanear la economía. Se acometen además las reformas estructurales necesarias para reforzar la competitividad de la economía, el capital humano y el potencial tecnológico y promover más competencia y flexibilidad en los mercados.

Pero estas medidas, incluidas en el más drástico programa de austeridad aplicado por Lisboa en sus tres décadas de democracia, amenazan con exacerbar otro frente, el de la contestación social.

Por primera vez en 22 años los dos grandes sindicatos nacionales la Confederación General de Trabajadores Portugueses (CGTP, comunista) y la Unión General de Trabajadores (UGT, socialista) se han unido en la convocatoria de una huelga general el próximo miércoles. LA/EPF