Nueva York, 9 sep (EFE).- Los datos oficiales de peticiones de ayudas por desempleo que se divulgaron en Estados Unidos dieron hoy una alegría a los inversores en la Bolsa de Nueva York, que cerró con ganancias por segunda jornada consecutiva.
No obstante, el avance en las dos últimas sesiones ha sido moderado y con un volumen de negocio inferior a lo habitual, algo que ya se notó también en agosto, por lo que queda por ver si la corriente compradora se afianza a medida que avanza septiembre.
Sin embargo, se ha percibido un tono algo más animado desde la pasada semana y reflejo de ello es que el índice Dow Jones de Industriales, la principal referencia de la Bolsa de Nueva York, ha cerrado en positivo en seis de las últimas siete sesiones, con ayuda de algunos datos económicos y de empleo recientes algo alentadores.
El mercado bursátil neoyorquino finalizó la pasada semana con ganancias, después de constatar que en agosto se perdieron menos puestos de trabajo de lo que se preveía.
Este jueves, los datos de peticiones nuevas de ayudas por desempleo que dio a conocer el Departamento de Trabajo también fueron más favorables de lo esperado, lo que favoreció que la jornada bursátil comenzara ya con una firme tendencia alcista.
La pasada semana se registraron 451.000 solicitudes nuevas de subsidios por desempleo, 27.000 menos que en la anterior y una cifra más esperanzadora de lo que se esperaba, aunque los expertos consideran que deben bajar de 400.000 para ser indicativo de que mejora de manera significativa la contratación.
La evolución del mercado laboral es el asunto que observan en estos momentos con más atención los inversores, pues se considera que la economía estadounidense no entrará en una senda firme de recuperación hasta que mejore el empleo y los consumidores se sientan con más confianza para comprar más bienes y servicios.
A los datos de desempleo divulgados hoy se sumaron otros que reflejaron un descenso en julio del 14% en el déficit comercial de Estados Unidos, que se situó en 42.775 millones de dólares, frente a unos 47.300 millones que se preveían.
La evolución favorable en ambos frentes contribuyó a que el Dow Jones de Industriales cerrara la jornada con un alza del 0,27% (28,23 puntos) y llegase a 10.415,24 unidades, en tanto que el selectivo S&P 500 subió el 0,48% (5,31 puntos), a 1.104,18 puntos.
El índice compuesto del mercado Nasdaq ascendió el 0,33% (7,33 puntos) y concluyó la sesión en 2.236,20 unidades.
JPMorgan Chase (2,51%), Johnson & Johnson (1,65%), American Express (1,55%), AT&T (1,53%), Alcoa (1,45%), General Electric (1,34%), Pfizer (1,27%) y Verizon (1,25%), registraban los aumentos más notables entre los treinta componentes del Dow.
Otras siete empresas incluidas en ese índice cerraron con pérdida y fueron más agudas en el caso de McDonald's (-2,25%), que contabilizó un en agosto del 4,9% en sus ventas respecto del año anterior, algo menos de lo que se preveía.
Le siguieron Boeing (-1,64%), Dupont (-0,5%), Cisco Systems (-0,15%), Caterpillar y Home Depot, que bajaron el 0,14% en ambos casos y Procter & Gamble (-0,13%).
Fuera del Dow Jones, las acciones de la financiera Goldman Sachs subieron el 1,08%, a pesar de tener que abonar unos 27 millones de dólares a las autoridades reguladoras británicas por no avisarles de que era investigada en EE.UU. por un presunto fraude en la oferta de un producto financiero conocido como Abacus.
El barril de crudo de Texas para octubre se abarató el 0,56% y cerró a 74,25 dólares en el mercado neoyorquino del petróleo.
El dólar avanzó con moderación ante el euro y por esa divisa europea se pagaban 1,2705 dólares al cierre de la sesión bursátil, en tanto que la deuda pública de EE.UU. a diez años bajaba de precio y ofrecía una rentabilidad del 2,75%.