EE.UU. y Corea del Sur llegan a un acuerdo sobre el Tratado de Libre Comercio

AGENCIA EFE 05/12/2010 00:00

Dada la magnitud del mercado surcoreano y sus ramificaciones en Asia, el TLC entre los dos países es el mayor acuerdo comercial suscrito por EE.UU. desde que lanzó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con México y Canadá en 1994.

El tratado, que ahora debe ser ratificado por el brazo legislativo de ambos países, permitirá a EE.UU. incrementar las exportaciones anuales de bienes en hasta 11.000 millones de dólares, sostener a al menos 70.000 puestos de trabajo y crear nuevos, según la Casa Blanca.

En un comunicado, Obama se comprometió a trabajar con el Congreso y con los líderes de ambos partidos para lograr la ratificación del TLC con Corea del Sur, el cual "profundiza" su "fuerte alianza y refuerza el liderazgo estadounidense en Asia Pacífico".

El pacto impulsa el objetivo de Obama de duplicar las exportaciones estadounidenses en cinco años.

El acuerdo fue logrado tras unas reuniones que mantuvieron el representante de Comercio Exterior de EE.UU., Ron Kirk, y el ministro de Comercio surcoreano, Kim Jong-hoon, en Maryland.

Se produce, además, pocas semanas después de que Obama y su homólogo surcoreano, Lee Myung Bak, no lograran cerrarlo en la última cumbre del G20, que se celebró en Seúl.

El acuerdo representa el primer gran éxito de Obama en el terreno de los acuerdos de libre comercio y tras el pacto con Seúl podrían seguir, espera la Casa Blanca, otros que EE.UU. tiene pendiente de ratificar, como el TLC con Colombia y con Panamá.

Corea del Sur es el octavo socio comercial de Estados Unidos.

El convenio comercial eliminará los aranceles sobre un 95% de los bienes industriales y de consumo en cinco años.

Los negociadores de la primer economía y de la duodécima, lograron finalmente superar los obstáculos que imposibilitaban desde hace tres años ratificar el pacto.

El acuerdo con Corea del Sur, que se cerró en 2007 bajo el Gobierno de George W. Bush, no se ratificó principalmente por las limitaciones surcoreanas a las importaciones de carne de vacuno y automóviles estadounidenses.

En la renegociación del acuerdo, ambos países acordaron reducir gradualmente los aranceles estadounidenses sobre automóviles coreanos importados.

En concreto, acordaron que EE.UU. mantenga un arancel del 2,5% durante cinco años sobre los automóviles coreanos, mientras que Corea del Sur recortará inmediatamente a la mitad -del 8 al 4 por ciento- sus tarifas sobre las importaciones de vehículos estadounidenses y los eliminará plenamente en el quinto año.

El acuerdo sobre estos aranceles era crucial para conseguir el respaldo del sector automovilístico estadounidense, de los sindicatos y de los legisladores de Michigan.

El pacto de 2007 estipulaba la eliminación inmediata de los aranceles estadounidenses sobre un 90% de las exportaciones de automóviles coreanos.

Además, Corea del Sur eximirá a 25.000 automóviles de EE.UU. por fabricante del cumplimiento de sus estrictos estándares de seguridad, casi cuatro veces más que en el acuerdo de 2007, siempre y cuando cumplan las normas estadounidenses, también entre las más severas, según la Casa Blanca.

En cuanto a la carne de vacuno, otro escollo en las negociaciones, el acuerdo anunciado hoy cambia poco.

La demanda estadounidense para acceder sin restricciones al mercado surcoreano fue dejado de lado, por ahora.

Se mantiene la prohibición surcoreana a la importación de vacuno estadounidense de reses mayores de 30 meses, básicamente porque la mayoría de las exportaciones estadounidenses a Corea del Sur es de reses menores de 30 meses y, por tanto, el impacto económico para EE.UU. es reducido.