Ernst & Young registró en su ejercicio fiscal 2010-2011 unos ingresos globales de 22.880 millones de dólares (17.295 millones de euros), lo que supone un 7,6% más en comparación con los 21.255 millones de dólares (16.123 millones de euros) que facturó en el ejercicio anterior, según informó la compañía en un comunicado.
Por áreas, los ingresos crecieron en mayor medida en su división Asia-Pacífico (18,4%), mientras que en Japón aumentaron un 8,3%, en Américas un 7,3% y en EMEIA (Europa, Oriente Medio, India y África) un 5,5%.
En la moneda local, los ingresos aumentaron un 5,3% a nivel global. En concreto, aumentaron un 10% en Asía Pacífico, un 6,1% en Américas y un 4,5% en EMEIA, pero descendieron un 2% en Japón.
El presidente y consejero delegado de Ernst & Young, Jim Turly, destacó que la compañía ha registrado un ejercicio "muy sólido" en todas de sus áreas geográficas y sigue viendo reacciones "muy positivas" a la forma en que la empresa ha globalizado su organización en los últimos años y a sus inversiones en los mercados emergentes.
Asimismo, también destaca que todas sus líneas de servicio mostraron un incremento en sus ingresos este año, lo que refleja tanto su enfoque empresarial como un mejorado entorno económico y una renovada actividad en los mercados de capital el pasado año.
En esta misma línea, incide en que el buen comportamiento en los mercados emergentes se debe en gran medida a su programa de inversión estratégica puesto en marcha hace cinco años y que ya ha invertido 1.500 millones de dólares (1.137 millones de euros), la mayor parte en estos mercados. Como consecuencia, la facturación en 2011 aumentó un 26% en Brasil, un 22% en India, un 19% África o un 18% en China.
Por otro lado, la compañía añade que, como consecuencia de la mejora registrada en su negocio, Ernst & Young ha ampliado su personal en nómina en 10.877 personas en su último ejercicio fiscal, hasta alcanzar los 151.841 empleados.