En concreto, Inmobiliaria Carso se ha hecho con 6,9 millones de títulos de clase D equivalentes al 1,8% del capital, mientras que el Grupo Financiero Inbursa es propietario, directa o indirectamente, de otros 25,9 millones de títulos, también de clase D, representativos del 6,6% del accionariado de la petrolera controlada por el Estado argentino.
Los títulos de YPF cerranon este jueves en Wall Street en 10,45 dólares (8,11 euros), lo que supone valorar este paquete de acciones en 343 millones de dólares (271,58 millones de euros).
Repsol conserva aún el 12% de YPF, el 6% que le quedó tras la expropiación por el Gobierno argentino de un 51% del capital, más los derechos políticos sobre otro 6% que estaba en manos de su antiguo socio, el grupo argentino Petersen, controlado por Enrique Eskenazi, después de que éste no pudiera hacer frente a las condiciones del préstamo concedido para la entrada en el capital de la petrolera.
La empresa que preside Antonio Brufau ha anunciado que tomará medidas legales contra cualquier empresa que trate de invertir en YPF o en sus activos.