El presidente de Martinsa-Fadesa, Fernando Martín, ha afirmado que ha llegado el momento para la inmobiliaria, que hace dos años superó el mayor concurso de acreedores de la historia empresarial española, de "ajustar el valor del pasivo al valor de los activos".
En su intervención en la Junta General de accionistas, Martín recordó que la compañía "ha visto y sufrido una paulatina y constante depreciación del valor de los activos inmobiliarios", mientras el valor de los pasivos se ha mantenido "prácticamente inalterado", lo que ha producido "una cada vez más insalvable diferencia entre activos y deuda que ha provocado un deterioro en el balance de las empresas inmobiliarias".
Martín destacó que, desde que se inició el concurso de acreedores, la compañía ha conseguido cumplir contratos pendientes o situaciones irregulares heredadas, de más de 14.000 clientes, siendo la constante preocupación continuar cumpliendo los compromisos con los clientes, en la medida que la situación y las posibilidades de la compañía lo van permitiendo.
"No ha sido fácil, pero desde la aprobación del convenio hemos cumplido escrupulosamente con el plan de pagos previsto para nuestros 5.916 acreedores, incluso aunque la situación de mercado ha empeorado de forma muy considerable en los últimos años, superando desfases de tesorería en 2011 y en 2012, y afrontando enormes dificultades durante 2013", indicó.
Asimismo, Martín pidió al Gobierno una hoja de "ruta clara" para el sector inmobiliario "que elimine las incertidumbres dentro y fuera del país, recobrando la credibilidad y la confianza de ciudadanos e inversores".
Por otra parte, Martín informó de la situación del recurso de casación por el que ejerce una acción de responsabilidad contra los anteriores administradores de Fadesa, Manuel Jove y Antonio de la Morena, y donde se reclama la reparación de un daño patrimonial valorado en 1.576 millones de euros, y que actualmente se encuentra pendiente de ser admitido a trámite en el Tribunal Supremo.
GESTIÓN MARCADA POR LA AUSTERIDAD.
Además, el presidente de Martinsa-Fadesa incidió en que la gestión en los últimos años de la compañía ha estado marcada por la austeridad. Así, los gastos de explotación del grupo -incluyendo sus filiales internacionales- en 2012 han disminuido un 11% respecto al ejercicio pasado, y acumulan ya una disminución del 81% respecto a los gastos de explotación incurridos en el ejercicio 2008, añadió.
En materia de retribuciones, destacó que la masa salarial ha disminuido un 10% respecto al ejercicio pasado y un 83% respecto al año 2008, mientras que la retribución asignada a la alta dirección se ha reducido un 26% respecto al año pasado y un 77% respecto al 2007.
La reducción respecto al consejo de administración fue del 31% respecto al año pasado y del 62% con respeto al 2007, mientras que en el capítulo de los consejeros ejecutivo, la reducción fue del 39% respecto al ejercicio pasado y del 72% con respecto al 2007.
En lo que respecta a la actividad de la compañía, Martín detalló que el grupo totalizó 972 unidades escrituradas (viviendas, locales comerciales y oficinas) en 2012. De ellas, 494 (51%) correspondieron a España y 478 (49%) al área internacional, alcanzando una cifra neta de negocio de 160 millones de euros.