Los ingresos totales ascendieron a 219,6 millones de euros, con un incremento del 8,7% respecto al ejercicio anterior, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 178,9 millones de euros, un 10,6% más que en 2014, lo que representa un margen operativo del 81,5%.
La compañía invirtió el pasado ejercicio 245 millones de euros, un 56,5% más que en el año anterior, destinados fundamentalmente a los programas satelitales en curso (AG1, Amazonas 5 e Hispasat 1F), así como a proyectos de innovación tanto en satélites como en productos y servicios.
Los ingresos por capacidad espacial ascendieron a 216,4 millones de euros, un 9,72% más que en el anterior ejercicio. La compañía que preside Elena Pisonero se ha beneficiado del efecto positivo del tipo de cambio, favorecido por la fortaleza del dólar, que ha contrarrestado la fuerte depreciación del real brasileño.
Por áreas geográficas, el 34,6% de los ingresos por arrendamiento de capacidad espacial del grupo proviene de Europa y el Norte de África, mientras que el 65,4% se origina en el mercado americano.
El esfuerzo comercial realizado se tradujo en la consolidación de un elevado 'back-log' (contratación asegurada de capacidad satelital a largo plazo), que a cierre del ejercicio se mantenía en una cifra equivalente a siete veces los ingresos anuales de la compañía.
Para Pisonero, "la estrategia desarrollada por la compañía en 2015 ha dado buenos resultados y le ha permitido crecer. En este ejercicio hemos trabajado intensamente y apostado por la entrada en nuevos mercados, como el de Marruecos. Hemos obtenido nuevas posiciones orbitales, cerrado alianzas con otros operadores y renovado y ampliado contratos con grandes clientes, especialmente en Latinoamérica, en países como Brasil, Perú, México y Colombia".