Invertir en verde, es decir, de manera sostenible y con responsabilidad social y ambiental comienza a ser una preocupación... pero está lejos de ser una prioridad. El 82% por ciento de los clientes que invierten su dinero en fondos de inversión no tiene en cuenta este tipo de criterios. Queda pendiente superar la barrera del desconocimiento. El 47% de los inversores apostaría por 'fondos verdes' si ofreciesen una rentabilidad igual o superior a los fondos comunes. Son los datos del Observatorio de Inverco, Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones.
En lo que va de año en España se han emitido 4.600 millones de euros en los llamados 'bonos verdes'. La banca hace guiños a un sector en plena expansión. Aunque inicialmente estos productos estaban pensados para clientes de corte más profesional, las entidades extienden poco a poco la oferta hacia los particulares, tanto en inversiones como en financiación.
Es el principal índice del mundo, referencia para los inversores que quieren apostar por la sostenibilidad y se fija en la gobernanza de las empresas, su apuesta ambiental y en la responsabilidad social corporativa. Nació en 1999 como un índice no financiero.
El DJSI (por sus iniciales, en inglés) evalúa criterios como la transparencia, la gestión corporativa, las relaciones con los inversores, la calidad de la gestión y la responsabilidad social y medioambiental. Se renueva cada año a partir de los datos elaborados por las empresas. Este año, como novedad, también se ha tenido en cuenta la ciberseguridad y la privacidad de los datos y se ha reforzado el control sobre las energías verdes de las empresas, su apuesta por materias primas sostenibles o la agricultura ecológica.
16 empresas españolas están en el ‘Olimpo de la sostenibilidad’: ACS, Santander, Ferrovial, Enagás y Naturgy, Amadeus, Bankinter, BBVA, CaixaBank, Endesa, Iberdrola, Inditex, Indra, Mapfre, Red Eléctrica y la embotelladora Coca-Cola European Partners.
Son instrumentos de deuda destinados a financiar o refinanciar proyectos sostenibles que se miden bajo unos parámetros determinados por la Asociación Internacional del Mercado de Capitales (ICMA por sus siglas, en inglés). Según la agencia de calificación Moody's, en los tres primeros trimestres del año, las emisiones de bonos verdes crecieron un 67% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta cerca de los 187.000 millones de dólares, pero apenas supusieron un 4% del total de bonos emitidos. Si se cumplen las previsiones, este año podría cerrarse con hasta 250.00 millones de dólares en emisiones de bonos verdes.
En España, el Tesoro Público todavía no ofrece este tipo de productos a los que sí se puede acceder en países europeos como Polonia, Francia, Bélgica, Holanda o Irlanda. El Tesoro podría poner en el mercado sus primeros bonos verdes el próximo año.
Las empresas buscan inversiones apelando también a la sensibilidad por sus proyectos.