El resultado consolidado del grupo fue de 31,9 millones de euros, si bien el dato no resulte comparable debido al impacto negativo contable en sus cuentas de su emisión de bonos convertibles, explicó la cadena.
Meliá completó en septiembre de 2013 una emisión de obligaciones convertibles o canjeables por valor de 50 millones de euros, que se sumaron a los 200 millones de euros emitidos en marzo del mismo año, para dotarse de mayor liquidez, y que vencían a finales del año pasado.
En 2014, la cifra de negocio de la cadena hotelera balear alcanzó los 1.464,2 millones de euros, lo que supone una mejora del 6,9% con respecto al ejercicio anterior.
Meliá destacó que por primera vez en un ejercicio completo el ingreso medio por habitación (RevPar) se produjo en todas sus divisiones desde el inicio de la crisis con un incremento global del 8,7%, que hubiera sido del 12,5% de no verse afectado el resultado por el ajuste cambiario.
El resultado de explotación del grupo alcanzó los 133,4 millones de euros, lo que supone una mejora del 9%, mientras que el beneficio antes de impuestos alcanzó los 57,1 millones, un 3,9% más.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) sin plusvalías, excluyendo la menor generación de plusvalías por venta de activos, ascendió a 213,5 millones de euros, un 12% más que en 2013 pese al impacto del tipo de cambio. Meliá cifra en 182,2 millones el impacto negativo del ajuste realizado por la compañía en el tipo de cambio del bolívar venezolano.