En la entrevista, recogida en la página web de la televisión británica, la canciller subrayó que el nivel de desempleo en países como Grecia o España representa una "enorme crisis", pero insistió al mismo tiempo en su defensa del control estricto del gasto.
En este sentido, recordó que cuando el desempleo se disparó entre los jóvenes de Alemania, muchos de ellos sólo encontraron trabajo "porque se mudaron al Sur". "Tendría que haber más movilidad", remarcó.
Merkel subrayó también que es "injusto" que sean los jóvenes quienes tengan que "pagar los platos ratos" por lo que no se hizo en su momento. "Pero no hay manera de evitarlo. Tenemos que fabricar productos u ofrecer servicios en Europa que podamos vender", agregó.
Asimismo, la canciller alemana mantuvo que la política aplicada durante la crisis fue en conjunto "correcta", y resaltó que la cuestión no es la austeridad, sino "cómo volver al crecimiento". "En lo que respecta al empleo y el crecimiento, la eurozona y otros países están en una situación complicada", admitió.
En esta línea, incidió en que la política de equilibrio presupuestario se ha aplicado con "flexibilidad". "Sabe tan bien como yo que los países europeos estuvieron de acuerdo en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Sin embargo, hemos dejado que muchos países tengan la posibilidad de tener un déficit por encima del 3%. Francia, por ejemplo, pero también España y Portugal", añadió.
Además, Merkel apuntó que las políticas acordadas para economías como la griega o la española no fueron una idea propia suya, sino que fueron acordadas entre la 'troika' --la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI)--.