La OAMI, con sede en Alicante, es el organismo comunitario encargado de proteger las marcas que operan en el mercado único que forman los Veintisiete, y desde 1996 ha registrado más de 500.000 solicitudes procedentes de empresas y particulares de los cinco continentes.
Según la OAMI, la petición de estos emprendedores fue presentada el pasado 21 de enero, precisamente un día después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, tomara posesión del cargo en Washington.
La idea de registrar "Obama" parte de un grupo formado por un publicista, un economista, un empresario textil y una abogada de la Comunidad de Madrid, "cuatro amigos", con la idea de aprovechar "un nombre atractivo" para desarrollar un futuro proyecto empresarial, que aún no está definido.
En declaraciones a Efe, uno de estos peticionarios, Juan Pérez, ha explicado que la iniciativa se le ocurrió a él justo el día en que Obama ganó las elecciones, al oír que doscientos estadounidenses alojados en un hotel de Barcelona habían decidido celebrar el triunfo del demócrata en un bar que acababa de inaugurarse en la Ciudad Condal con el nombre del nuevo presidente.
A partir del convencimiento de que es "una buena marca para cualquier tipo de negocio" y de que aún no tienen claro qué fin darle, han tramitado su protección para un "amplio" abanico de productos y servicios en toda la UE, como en el de vestidos, calzados y sombrerería.
También han registrado su uso en el sector de los seguros y negocios financieros, monetarios e inmobiliarios, así como para productos educativos, formativos, de esparcimiento, actividades deportivas y culturales, y para los servicios de restauración (alimentación) y hospedaje temporal.
"Creemos que se trata de una buena marca para afrontar diferentes negocios, aunque aún no nos hemos sentado tranquilamente para ver qué hacemos exactamente", ha indicado Pérez, quien ha subrayado que los "cuatro amigos" tienen "muchas ideas" aún no concretadas.
"Obama es un nombre ya conocido, con sonoridad, renombre y que aporta una difusión gratuita que permite ahorrar mucha publicidad", ha destacado.
Una vez que la OAMI ha aceptado registrar el término, los peticionarios han sido requeridos para el pago de la correspondiente tasa, de poco más de 1.500 euros, tras lo cual la marca quedará formalmente protegida en el espacio económico que forman los Veintisiete.
Pérez ha señalado que, a parte de usar "Obama" con un fin comercial, se han planteado utilizar la marca para dar nombre a una fundación no gubernamental (ONG).
La solicitud presentada por los cuatro particulares madrileños ha sido evaluada durante semanas por los examinadores de la OAMI, que no han visto objeciones en que el término coincidiera con el apellido del presidente de Estados Unidos.
Habitualmente, las peticiones que coinciden con nombres propios de personajes con trascendencia son objeto de un estudio más exhaustivo por parte de los eurofuncionarios de la OAMI.
En casos anteriores, la Euroagencia ha denegado otras solicitudes de empresas que en su día pidieron registrar términos como "Bill Clinton" o "Fidel Castro", por las connotaciones que lleva implícitas.
También como curiosidad, poco antes de 2003 se rechazó en dos ocasiones solicitud de registrar el nombre "Bin Laden" como marca comunitaria, al considerar que podría tener un uso relacionado con la "apología del terrorismo".