La oposición cree que la cotización de retribuciones en especie causará más paro y nuevas pérdidas salariales

En declaraciones a los medios en los pasillos de la Cámara Baja, la portavoz socialista de Seguridad Social, Isabel López i Chamosa, ha pronosticado que esta medida supondrá la pérdida de esos beneficios sociales (cheques restaurante, ayudas al transporte, etc.), porque "los empresarios no van a pagar nada de su bolsillo". "Esto significará una rebaja más de los salarios en concepto de otros ingresos que tenían los trabajadores", ha insistido.

Además, ha tachado de "lamentable" que un asunto que corresponde a la negociación colectiva se haya aprobado por decreto ley. "Parece que son alérgicos al diálogo, a comunicar a los agentes sociales, y se meten en cosas que realmente son de negociación colectiva. Lo hacen por ordeno y mando", ha reprochado.

Así, la diputada catalana ha señalado que su grupo estaría "dispuesto a hablar" de medidas para mejorar los ingresos de la Seguridad Social, pero cree que una vía mejor sería, por ejemplo, revisar la decisión de congelar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que "en dos años ha perdido casi un 4%" de poder adquisitivo, lo que supone "350 millones que no ingresa la Seguridad Social" por cada punto porcentual.

MEDIDA "INOPORTUNA"

Para el portavoz económico de UPyD, Álvaro Anchuelo, la medida es "inoportuna en un momento de dificultades que atraviesan empresas y trabajadores". "Podemos compartir el principio general de que las diferentes formas de ingresos tienen que cotizar de forma parecida, pero eso debería hacerse de forma gradual. Hacerlo de una forma tan brusca en una situación de dificultad puede ser contraproducente y puede incluso dificultar la recuperación en algunos sectores como la hostelería", ha señalado.

El diputado de la formación magenta también ha recriminado al Ministerio de Empleo "las formas" en que ha aprobado estas medidas, "por sorpresa, aprovechando las fiestas navideñas y sin consultar con los agentes sociales y los demás partidos". "Ésa nunca es la forma más apropiada de proceder", ha zanjado.

Carles Campuzano, de CiU, coincide en sus temores de que la medida del Ejecutivo acabe perjudicando a la creación de puestos de trabajo. "El Gobierno parece olvidar que el principal problema de la economía y la sociedad es el paro, y continúa desarrollando una política económica que no va orientada precisamente al mantenimiento o la creación de empleo, sino a la destrucción del tejido empresarial y a la creación de más paro", ha criticado.

Y es que, a su juicio, cualquier decisión que suponga "incrementar el coste de la contratación" supone un "desincentivo" a la creación de puestos de trabajo, y ha recordado que si hay que buscar nuevos ingresos para la Seguridad Social debe ser siempre "sin destruir empleo".

Por eso, ha recomendado al PP que "tome nota" del discurso del presidente francés, François Hollande, o del líder del Partido Democrático (PD) italiano, Matteo Renzi, para quienes "la orientación de la política para crear y mantener empleo no pasa por incrementar los costes sociales". "El Gobierno va en contra de lo que se hace en el resto de Europa", ha añadido.

El nacionalista catalán también cree que la forma de adopción de las medidas ha sido "un error" ya que estas cuestiones deberían tratarse "en el marco del diálogo social". Por eso, ha reclamado que el decreto ley, una vez sea convalidado por el Congreso la próxima semana, sea tramitado como proyecto de ley.

Por último, el portavoz de Empleo de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Joan Coscubiela, cree que "el problema en este momento es otro" ya que "la política laboral del PP no está creando empleo sino sólo transformándolo en más precario". "Y los empresarios de la CEOE contribuyen a ello", ha añadido, rechazando que la patronal se queje de la decisión de que todo el salario cotice.