En la Junta General de accionistas de la entidad, Ron explicó que en estos momentos "históricos", el banco "estará atento a las oportunidades de adquisición", ya que "no sería de buenos profesionales no estarlo".
"Dicho esto, ha de quedar claro -dijo- que en cualquier proceso de consolidación, el Banco Popular tiene vocación de independencia", por tanto, de ser "el comprador".
En este sentido, insistió en que el punto de partida del banco es el de crecer orgánicamente porque "ante tanta distracción, se presentan clarísimas oportunidades de atraer nuevos clientes".
"Daremos prioridad al crecimiento orgánico, aprovechando la ventaja competitiva que supone estar centrados en el negocio", sentenció Ron, quien también adelantó que la entidad estudiará las oportunidades en función de su generación de valor y de su precio.
"No tenemos urgencias y no son tiempos para pagar precios altos", dijo Ron, quien aseguró que la calidad de la cuota del mercado está por encima de la cantidad de ésta.
También destacó que a la entidad no le interesa ninguna operación que tenga riesgo de politización, ya que un rasgo fundamental de la identidad del banco "es su independencia".
Durante su intervención, el presidente del Banco Popular resaltó que el sector financiero español se enfrenta en 2011 "a retos muy relevantes", sin duda, dijo, "el entorno más difícil al que nos hemos enfrentado jamás" y "ante el que no cabe el conformismo".
Estos retos, dijo, son el propio negocio, que se verá afectado por la mayor presión en los márgenes y las elevadas provisiones, una nueva regulación más exigente y la reestructuración de las cajas de ahorros.
Sobre este asunto, Ron explicó que aunque el proceso de reestructuración "avanza, lo hace lentamente" y aseguró que sigue existiendo una enorme capacidad instalada en el sector, por lo que abogó por intensificar la reducción de la red de sucursales.
Para Ron, la primera fase de la reestructuración "no ha sido suficiente", ya que han persistido las dudas sobre la calidad de los balances, y porque el modelo elegido en algunos casos ni maximiza sinergias, ni resuelve todos los problemas del gobierno corporativo.
Así, recalcó que el proceso debe hacerse "rápido y bien", ya que de como se haga dependerá el éxito del proceso.
"Y necesitamos que el proceso sea un éxito para que repercuta positivamente también sobre la prima de riesgo y sobre el resto del sistema financiero", pidió Ron.
En concreto, para Ron el reducir el diferencial entre el bono español y el alemán "es una cuestión prioritaria".
El presidente del Banco Popular también hizo referencia hoy a las nuevas exigencias de capital exigidas por el Ejecutivo, sobre las que dijo que el Popular ha presentado un ratio de capital principal que está entre los más altos de los bancos cotizados.
"Nos hemos anticipado al endurecimiento de las exigencias regulatorias, hemos logrado reducir significativamente la dependencia de los mercados mayoristas y hemos hecho un esfuerzo para estabilizar la morosidad, cuyo crecimiento el año pasado muestra síntomas de ralentización", concluyó.