El mínimo exento de las indemnizaciones por despido pasará de 20.000 a 180.000 euros. Tendrá pocas consecuencias para quien se quede en paro porque con este cambio el 99,9% no tendrá que pagar. Tampoco gustó que se suprimieran algunos beneficios para el alquiler y aquí más que marcha atrás el gobierno ha dado un pasito atrás. Finalmente se mantiene en el 60% el alquiler que no tendrá que tributar. Montoro quería bajarlo al 50%. Pero el Gobierno se mantiene en sus trece en eliminar la exención total de la renta de alquiler para quienes arrendan una vivienda a menores de 30 años. Otra novedad es que los mayores de 65 años no tendrán que pagar por los beneficios derivados de las ventas ya sea de inmuebles o acciones si dedican ese dinero a completar su pensión. El resto es sabido: rebajas de impuestos para pymes, autónomos y, en la renta, 20 millones de contribuyentes se beneficiarán de la bajada de este impuesto, injusto para muchos porque beneficia a quien más tiene.