La Unión de Empresas Siderúrgicas (Unesid) ha resaltado la necesidad de "un gobierno estable" para llevar a cabo medidas que aseguren la competencia del sector, que trata de competir con la industria china a través de la transparencia y la sostenibilidad en el proceso de proceso de producción.
El director general de Unesid, Andrés Barceló, ha criticado en una rueda de prensa la "competencia desleal" de la industria siderúrgica china, a la que acusa de "inundar los mercados con materiales a precios de derribo, poniendo en riesgo miles de puestos de trabajo de la industria europea".
Frente a esto, asegura que no pide que España aplique una protección arancelaria, sino que el Gobierno y las instituciones europeas premien las actuaciones que hacen "más allá de la ley". "Si la UE concede a China el estatus de economía de mercado, será imposible aplicar los instrumentos de defensa comercial contra sus importaciones desleales", ha explicado.
Por su parte, la experta técnica y medioambiental de Unesid, Carola Hermoso, confía en que existe un aumento de la preocupación social sobre el impacto social y medioambiental del proceso de producción de los productos. Para ello, destaca la importancia de que la industria lleve a cabo una "transparencia máxima en todos los niveles".
Aunque Barceló admite que se ha producido "un cambio en el discurso", advierte que "falta pasar de las musas al teatro". "Cuando adquirimos un producto importado, también importamos su impacto económico, social y medioambiental", recuerda, e insiste en la necesidad de marcos regulatorios adecuados para asegurar el valor añadido de la industria. Sin embargo "nadie puede modificar nada sin un gobierno", lamenta.
Para la industria española es prácticamente imposible competir en precios con la industria China, por lo que la ventaja competitiva radica en la sostenibilidad de sus procesos de producción y la apuesta por una economía circular. Para concienciar de ello, Unesid ha presentado este jueves sus datos sobre sostenibilidad económica, social y ambiental de la industria siderúrgica española 2016.
REDUCCIÓN DE EMISIONES
La emisión de gases de efecto invernadero se ha reducido en las empresas siderúrgicas españolas de 199 kilogramos de CO2 por tonelada de acero en 2013 a 181 en 2015, y la totalidad de empresas siderúrgicas posee sistemas de gestión ambiental. En España se reciclan 19 toneladas de acero por minuto, para lo cual Barceló asegura que "no es necesario ningún incentivo económico", ya que el ahorro de agua y energía resulta rentable para el sector.
El director general también defiende que la industria española se encuentra muy por encima de la media europea. "No creo que nuestros colegas tengan niveles de reciclaje y recuperación total del agua como los nuestros", señala, y explica que el 97% de los subproductos de la industria siderúrgica pueden reciclarse, aunque todavía falta por eliminar algunas trabas administrativas para que esta cifra sea del 100%.
Actualmente, el 82% del acero producido se fabrica en empresas que editan memorias de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), y el 60% de éstas ha firmado el Pacto Mundial de Naciones Unidas para colaborar con la sociedad civil.
En cuanto a sostenibilidad económica, los datos reflejan que la industria siderúrgica española invirtió en España 301 millones de euros en nuevos procesos y productos más innovadores y sostenibles en 2015, 32 millones menos que dos años antes, y que generó un valor económico de 11.187 millones de euros, frente a los 14.376 millones de 2013. El descenso se justifica por la situación actual del sector de la construcción, el cual es responsable de consumo del 40% del acero en España, y que aún sufre los estragos de su caída tras la crisis, ha comentado Barceló.
Por otra parte, la industria siderúrgica española invirtió 25 millones de euros en formación en 2015, lo que constituye una media de unas 29 horas formativas al año por trabajador. Barceló ha destacado la importancia de este tipo de inversión, ya que los trabajadores utilizan cargas muy pesadas que requieren una "alta formación en prevención de riesgos", y presume de que el 100% de las empresas del sector incluyen sistemas de gestión de seguridad.
Asimismo, señala que se necesita un tiempo para que los empleados comiencen a rendir, por lo que "es muy rentable que no estén cambiando". De esta manera, la rotación del sector es inferior al 3%. Actualmente, la industria siderúrgica en España emplea a unas 60.000 personas y distribuye retribuciones salariales por un importe de 1.460 millones de euros.