En comparativa trimestral, el superávit de la balanza por cuenta corriente de la UE descendió un 15,2%, frente al saldo positivo de 49.400 millones de euros (1,3% del PIB) registrado en el primer trimestre del ejercicio actual.
Por partidas y en términos trimestrales, el superávit de la cuenta de bienes disminuyó un 0,5% hasta contabilizar un saldo positivo de 34.300 millones de euros, mientras que el de servicios retrocedió un 2% hasta 39.500 millones de euros.
Además, el déficit primario de la balanza de la UE se incrementó hasta 7.800 millones de euros en el segundo trimestre, frente al déficit de 2.200 millones de euros del primer trimestre de 2016. El déficit secundario, por su lado, se incrementó desde 23.200 millones de euros hasta 24.100 millones de euros. El déficit de la cuenta de capital se redujo un 3,6% hasta 13.400 millones de euros.
Los principales socios de los Veintiocho en el segundo trimestre del ejercicio y que apoyaron así el superávit de la UE, fueron Estados Unidos, suiza, Hong Kong, Brasil y Canadá. Al contrario, aquellos países a los que la UE apoyó a su superávit y, por ende a su propio déficit, fueron China, Rusia, Japón, dentros financieros extraterritoriales e India.
Por último, la inversión directa de activos de la UE aumentó en en 42.200 millones de euros en el segundo trimestre del año, mientras que la inversión directa de pasivos aumentó en 221.000 millones de euros. Como resultado, la UE se posicionó como un receptor neto de inversiones directas en el segundo trimestre del ejercicio vigente en 178.900 millones de euros.
Por su parte, el superávit de la eurozona se situó en 71.700 millones de euros (2,6% del PIB) en el segundo trimestre de 2017, una caída del 25,3% respecto al mismo periodo de un año antes y de un 15,6% respecto al trimestre inmediatamente anterior. El superávit de la cuenta de bienes se situó en 81.700 millones de euros en la eurozona y la de servicios en 17.300 millones de euros.
La cuenta de ingresos primarios entre los Diecinueve alcanzó un superávit de 17.700 millones de euros, mientras que la secundaria alcanzó un déficit de 44.900 millones de euros.