El preacuerdo al que llegaron los representantes de los trabajadores con el sindicato fue ratificado en varias asambleas y el 73,6% de los votantes apoyó el acuerdo, según publica este martes 'Expansión'.
El ERE contempla una suspensión de 100 días este año y 100 más en 2015, pero los empleados tienen varias alternativas: una excedencia voluntaria de dos a cinco años, con una retribución de 6.000 euros anuales; una reducción salarial del 15% durante los dos años; una reducción mínima de salario y jornada del 37,5%, y bajas incentivadas con una indemnización de 33 días por año trabajado y un máximo de 15 mensualidades.
En enero, el sindicato planteó al comité de empresa un expediente para reducir la plantilla en 55 personas --alrededor del 20% del total de trabajadores--, aduciendo a la difícil situación económica debida la caída de las afiliaciones por la reducción del empleo, lo que ha supuesto una bajada de los ingresos por cuotas, a lo que se suma también la reducción de las subvenciones de las administraciones y los programas de formación.
En junio de 2012, UGT de Cataluña ya empezó a aplicar un ERE temporal para toda su plantilla de hasta seis meses y durante dos años.