El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, explicó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que de la prórroga de esta ayuda se podrán beneficiar los menores de 30 años, los mayores de 45 y aquellos con edades comprendidas entre 30 y 45 años que tengan cargas familiares. Las dos fases anteriores de esta ayuda iban dirigidas a desempleados menores de 65 años.
Es la segunda vez que el Gobierno decide dar continuidad a esta ayuda, denominada 'Programa Temporal de Protección por Desempleo e Inserción' (Prodi). El coste de esta nueva prórroga, que abarcará desde el 16 de agosto de este año hasta el 15 de febrero de 2011, ambos inclusive, será de 420 millones de euros y el número de beneficiarios potenciales alcanza los 219.000, según precisó Corbacho.
Para acceder a esta ayuda, los parados que cumplan con los criterios tendrán que haber extinguido la prestación por desempleo de nivel contributivo o no contributivo y adquirir el compromiso de participar en itinerarios de inserción para favorecer su vuelta al mercado laboral. En este sentido, Corbacho destacó que el objetivo del Prodi no es que los parados cobren los 426 euros, sino que vuelvan al mercado laboral "lo antes posible".
El 30% encuentra empleo
Según los datos aportados por el ministro, desde su puesta en marcha hace ya un año, de la ayuda de 426 euros se han beneficiado más de 615.700 desempleados, de los que sólo 189.000, el equivalente al 30,7%, han encontrado un puesto de trabajo.
De acuerdo con la mencionada resolución del Congreso, Corbacho informó además de que a partir del mes de septiembre, su cartera realizará un "estudio en profundidad" sobre esta ayuda y sobre cómo mejorar las políticas activas y pasivas para la pronta reincorporación al mercado laboral de los desempleados.
"Desde que estalló la crisis, el Gobierno apostó por políticas de protección, que hoy cubren al 80% de los parados, pero en los primeros síntomas de salida de la crisis hay también que apostar por las políticas activas", destacó el ministro.
En este estudio se analizará si la ayuda de 426 euros debe mantenerse en el futuro, si debe ser modificada o si, por el contrario, se necesitaría poner en marcha otro programa diferente.