Prisión para la célula yihadista, liderada por un expreso de Guantánamo, que captaba menores para el DAESH

EUROPA PRESS 25/02/2016 21:41

El magistrado ha tomado este jueves declaración en calidad de investigados a los tres detenidos el pasado martes en Ceuta, mientras que el cuarto supuesto miembro de la red pasará a disposición de las autoridades del reino alauí al haber sido arrestado en Nador. La Fiscalía ha pedido prisión para los tres.

Abderrahman Ahmed ha rehusado declarar ante el juez, mientras que Hamsa Layachi Abdeslam y Morad Duas Mohamed han negado tener vínculos con el terrorismo, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas. Uno de ellos es hermano de un terrorista que había perpetrado en 2013 un ataque suicida contra un cuartel militar en Siria a través un camión bomba.

Todos ellos están acusados de formar parte de una red que operaba en España y Marruecos y tenía la "firme voluntad de actuar ya en territorio nacional", según aseguró el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que añadió que se trataba de un grupo "fuertemente radicalizado y adoctrinado".

De hecho, disponían de un círculo de contactos que le hacían viable la adquisición de armas y material para la fabricación de explosivos, mientras que habían establecido una infraestructura de captación, adoctrinamiento, radicalización y envío de yihadistas para su integración en la organización terrorista DAESH.

REUNIONES CLANDESTINAS EN UN LOCAL COMERCIAL

La célula instruía a los adeptos en las medidas de seguridad en reuniones clandestinas que tenían lugar en el domicilio y en un local comercial que regentaba unos de sus líderes. Su atención estaba puesta en captar a menores de Ceuta con el fin de que se uniesen a las filas del DAESH en Irak o Siria.

Se valía de Internet, las redes sociales y los blogs "terroristas" restringidos para ejercer una intensa labor de apología de esta organización terrorista, al mismo tiempo que eran fuente de información y comunicación. De hecho, las acciones terroristas cometidas por el DAESH eran asumidas como propias al identificarse ellos mismos como "compañeros" de los autores.

Interior subrayó también que el hermano del fallecido en Siria destacaba por su "papel carismático" y por ser un "referente doctrinal" en la comunidad de la zona. "Estaría decidido a llevar su compromiso y lealtad al DAESH hasta el final, convirtiéndose en un mártir de la causa como ya hiciera su hermano, que falleció tras ejecutar una acción suicida en Siria", informó el Ministerio. El otro detenido en Ceuta realizaba labores de apoyo a los dirigentes.

EL LÍDER RECLAMÓ TENER UNA "VIDA NORMAL"

Por su parte, el expreso de Guantánamo recibió formación militar y de combate en campos de entrenamiento de Afganistán bajo el dominio de organizaciones terroristas yihadistas, donde estuvo combatiendo hasta que en el año 2002 fue detenido y, posteriormente, internado en el penal estadounidense de Cuba.

Tras su regreso a España, Abderrahaman fue detenido el 12 de febrero de 2004 y permaneció en la cárcel hasta el 13 de julio de ese mismo año cuando quedó en libertad provisional. En octubre de 2005 la Audiencia Nacional le condenó a seis años de cárcel por un delito de integración en la organización terrorista Al Qaeda.

La sentencia consideró probado que en 1998 el 'talibán español' decidió profundizar en el estudio del islamismo en su vertiente fundamentalista ante la situación de Chechenia, Cachemira y Palestina, para lo que comenzó a frecuentar en Ceuta a un individuo residente en Marruecos que había estado en Afganistán llamado Abdellah, que le adoctrinó en la 'yihad' y le acompañó a Gran Bretaña en 2000, donde leyó revistas sobre las guerras de Indonesia, Palestina, Bosnia, Chechenia y Afganistán, visionó discursos de imanes y frecuentó la mezquita de Nur.

En Kandahar recibió clases de árabe, estudio del Corán, fue adoctrinado sobre la 'yihad', entrenado físicamente y recibió enseñanzas teóricas y prácticas en el manejo de armas hasta que, ocurrido el 11-S en 2001, y ante la inminencia de una intervención del ejército de Estados Unidos, decidió huir a Pakistán, desde donde fue entregado a Estados Unidos para ser recluido durante dos años en la base de Guantánamo.

No obstante, el Tribunal Supremo en España le absolvió en 2006 al declarar nulas las pruebas obtenidas contra él durante su estancia en Guantánamo, un "verdadero 'limbo' en la comunidad jurídica", según el alto tribunal.

Tras su absolución, se mostró en una rueda de prensa "muy contento por volver a ser libre" y expresó su deseo de vivir "como una persona normal" y ganarse la vida trabajando de camionero y "recuperar la normalidad de un joven de 31 años".