El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, que investiga las posibles irregularidades en la contratación del avión, ha solicitado que se tome ya la decisión. Marlaska justifica en un autor la urgencia con la que deberá pronunciarse el Alto Tribunal en el hecho de que el próximo lunes se cumple el plazo de cinco años previsto para la prescripción de ese delito.
Trillo por su parte se muestra tranquilo cuanto menos. Las palabras del ex titular de Defensa son muy claras. "Cuando uno tiene la conciencia tranquila no tiene miedo de nada, sino que lo que está deseando desde hace cinco años es que se llegue de verdad al fondo del asunto y que cada cual quede en su sitio", ha explicado Trillo al ser preguntado por los medios de comunicación.
Por ello, el ex ministro desea que "por fin" se establezca con carácter judicial "la verdad" sobre el accidente del Yak-42 para así conseguir que "algún indeseable deje de jugar con el dolor ajeno y con la memoria de los muertos".
La petición de que se impute a Federico Trillo fue planteada al juez el pasado día 14 por la acusación que ejercen los familiares de los 62 militares españoles fallecidos en el siniestro, pero Marlaska considera que, dada la condición de aforado del ex ministro, que en la actualidad es diputado del PP, no debe ser él quien decida, sino al Supremo.
En ese escrito, de 58 páginas, los familiares de las víctimas pedían a Marlaska que imputara a Trillo por los delitos de imprudencia con resultado de muerte, malversación de caudales públicos y falsedad documental.
La acusación particular también solicitó que se imputara a la mayoría de la cúpula militar cuando ocurrieron los hechos, entre ellos el jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), Antonio Moreno Barberá, los jefes del Estado Mayor del Ejército (JEME), Luis Alejandre, y del Aire (JEMA), Eduardo González-Gallarza, y del jefe del Estado Mayor Conjunto (JEMACON), Juan Luis Ibarreta. Esta última petición, formulada también por la Fiscalía, fue atendida el martes por el juez.