Así, la sala desestima un recurso de apelación interpuesto contra dicha sentencia, en la que se condenaba al empresario por un delito de homicidio por imprudencia grave, en concurso de normas con un delito contra los derechos de los trabajadores.
En la sentencia de la Audiencia Provincial se rechaza el recurso bajo el argumento de que el acusado se encargaba directa y personalmente de la dirección de la empresa Pizarras Alexandre, S.L., acudiendo y supervisando en primera línea las obras encargadas.
Asimismo, se indica que en el juicio quedó reflejada la inexistencia de medidas de seguridad tanto colectivas como individuales y la falta de un plan de seguridad laboral.
Además, la sala apunta que el hecho de que el procesado se encontrara de viaje el día de los hechos "en absoluto" le sirve como excusa o como liberación de sus responsabilidades para con sus trabajadores y del cumplimiento de la normativa laboral y de prevención de riesgos con anterioridad.
Finalmente, la sala considera que sí hubo concurrencia de culpa por parte del fallecido, puesto "no es admisible" que el trabajador se encontrara desplazándose por el tejado de la vivienda con las botas a modo de "chancla", ya que las probabilidades de tropezarse aumentan "exponencialmente", con el "agravante" de encontrarse trabajando a cierta altura, y no portaba casco protector.