La Sala, compuesta por el presidente, Ángel Juanes, los tres presidentes de sala de lo Penal, Social y Contencioso-Administrativo y tres magistrados electos, ha decidido que todos los testigos, imputados y acusados citados por la Audiencia Nacional accederán, como norma general, "por la puerta destinada para el público".
El protocolo establece que sólo aquellos testigos que tengan la condición de protegidos "podrán acceder por zona restringida" si lo solicitan previamente y después de que el juez competente lo ponga en conocimiento de los servicios de seguridad de la Audiencia Nacional.
La norma se ha aprobado tras la declaración como imputada de Rosalía Iglesias que accedió de forma excepcional al edificio judicial tras una autorización concedida por la Policía. Por ello, el nuevo protocolo establece que únicamente será el juez quien goce de la potestad de permitir el acceso por zona restringida "a petición del interesado y nunca de oficio".
LA POLICÍA SÓLO 'CONSULTIVA'
"El acuerdo deberá ponerse inmediatamente en conocimiento del presidente de la Audiencia Nacional", añade. El papel de los servicios de seguridad policiales serán meramente "consultivo" ya que el juez o el presidente podrá pedir, si lo considera necesario, un informe que no será en ningún caso vinculante.
Según fuentes policiales consultadas en la Audiencia Nacional, la autorización concedida a la mujer de Bárcenas fue adoptada por el equipo de seguridad del tribunal después de "recibir una llamada" de una persona cuya identidad no fue aclarada en la que se pedía que la imputada accediera por el garaje debido a la ansiedad que le podía producir la declaración, al recordar su experiencia en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
A diferencia del resto de imputados y testigos que son citados a declarar, durante el tiempo que ha permanecido en la Audiencia Nacional la esposa de Bárcenas estuvo permanentemente acompañada por las Fuerzas de Seguridad.
Fuentes jurídicas explicaron que el instructor del caso, Pablo Ruz, no autorizó la protección ofrecida por el Cuerpo Nacional de Policía a la imputada, que evitó exponerse a las preguntas de los medios de comunicación, no fue consultado y no tenía conocimiento de la actuación de los agentes que la acompañaban, que vestían de paisano.
Rosalía Iglesias Villar, esposa del exsenador y extesorero del Partido Popular (PP) Luis Bárcenas, se negó a declarar y esgrimió un escrito de su defensa en el que se sostenía que no estaba obligada a tributar por la venta de varios cuadros valorados en medio millón de euros por la que se le atribuye un delito fiscal, informaron fuentes jurídicas.
El protocolo regula también la permanencia del público y la prensa en la planta donde se presten declaraciones de testigos o imputados. Precisa que el juez responsable podrá "limitar o restringir" el acceso si lo considera necesario y deberá comunicárselo al presidente de la Audiencia Nacional.