Barberá niega haber abroncado a la conductora de la EMT y dice que le preguntó qué es lo que no pagaba

EUROPA PRESS 26/06/2012 15:27

Barberá ha realizado estas declaraciones tras presidir la reunión ordinaria del Patronato de Feria Valencia, respecto a la denuncia de sindicatos de la EMT de que el pasado sábado recriminó a una conductora de la compañía, coincidiendo con la jornada de huelga en esta empresa, el sueldo que cobraba en presencia de los pasajeros que esperaban a reanudar la marcha.

La responsable municipal ha expresado su deseo de "volver" las cosas "a su sitio" y ha rechazado "engrandecer" lo sucedido. Ha explicado que el sábado por la tarde, sobre las 20.15 horas, antes del partido de fútbol entre España y Francia, vio "un autobús parado, vacío y lleno de pegatinas de 'Rita no paga'" y a su conductora en la acera.

Ha comentado que el vehículo no llevaba pasaje y que junto a él, también en la acera, había "dos o tres personas" y ha afirmado que lo que hizo fue preguntarle a la conductora qué es lo que ella no pagaba, como se podía leer en las pegatinas. Ha indicado que ésta no lo supo decir y ha destacado que la EMT "está pagando a todos".

Asimismo, la primera edil ha apuntado que explicó a las personas que había en la parada cuánto cobra un conductor de esta compañía. "Sencillamente, ni abronqué, ni nada de nada. Le encanta a la gente engrandecer. Le pregunté qué es lo que yo no pagaba. Le pregunte qué es lo que no paga la EMT y no lo supo decir porque la EMT está pagando a todos. Le pregunté qué es lo que no pagaba y nada más", ha argumentado.

Rita Barberá ha señalado que tras ello explicó "a la gente de alrededor que efectivamente el sueldo medio de un conductor es de 3.333 euros" y que lo que se está pidiendo es "bajar un 10 por ciento aproximadamente el salario para estimular la solidaridad y que no fueran 200 personas a la calle" de esta empresa pública.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

La alcaldesa ha agregado que "la conductora se subió al autobús y se marchó". "Eso es todo lo que pasó, pero por lo visto, el derecho a la libertad de expresión sólo lo tienen algunos y otros solamente tenemos derecho a recibir insultos, escarnios, vejaciones. Somos destinatarios de sus barbaridades y eso no es así", ha aseverado.

"Lo que no entiendo es por qué no puedo hablar con una conductora de autobús y preguntarle qué es lo que no pago. Eso ha sido todo. En cualquier caso lo que no gusta es que se sepa lo que cobran", ha añadido Barberá.