El juicio contra la acusada de asesinar a su compañera de trabajo en 2008 para cobrar sus seguros de vida suplantando su identidad y fingiendo la violación de la víctima se ha aplazado hasta el lunes 20 de febrero.
La vista oral que ha comenzado este martes en la Audiencia de Barcelona y que estaba previsto se desarrollara hasta el 17 de enero se ha suspendido después de que la acusada haya renunciado a su abogado en esta primera sesión alegando que no se han puesto de acuerdo en su estrategia de defensa.
Aunque el hasta ahora abogado defensor, Sergio Mercé, ha admitido que durante cuatro años han estado de acuerdo, ha reconocido: "Ha habido un conflicto entre la estrategia que proponía yo y la que quería ella, y ayer por la tarde me lo comunicó".
Tras contactar con la nueva letrada, Carmen Gómez, y confirmar esta que asumía la defensa de María Ángeles M., el juez ha reanudado la vista, y ha basado su decisión de aplazar el proceso hasta el 20 de febrero en que era "éticamente y deontológicamente difícil de compaginar con la defensa", reconociendo también el derecho de la acusada de cambiar de abogado.
En declaraciones a los medios de comunicación, el abogado de la acusación particular, Emilio José Zegrí, ha lamentado que el Tribunal no ha considerado el cambio de la defensa de la acusada una "maniobra para suspender el juicio".
Sin embargo, acusación y fiscal sí lo interpretan como "una maniobra dilatoria" para avanzar su salida de la cárcel y una posible huida, y por eso han solicitado que se prorrogue la cárcel provisional hasta que se dicte sentencia --muy probablemente después de marzo--.
"No hay que olvidar la facilidad que tiene para suplantar a personas", ha espetado una de las acusaciones, refiriéndose a la artimaña que presuntamente urdió la procesada para poder quedarse con los ingresos de créditos y seguros de vida contratados una vez muerta su compañera de trabajo.
El ya exabogado defensor ha pedido que se respete el máximo legal de ingreso en prisión provisional que es de un máximo de cuatro años.
Vistas las propuestas de las partes respecto a si la procesada debe permanecer o no en la cárcel mientras no salga la sentencia, el magistrado ha explicado que lo decidirá en los próximos días a través de una resolución.
LAMENTO DE LA FAMILIA
La suspensión de la vista ha indignado a los padres de la víctima que han abandonado el edificio lamentando: "No hay justicia. La justicia es una mierda".
Además, desde las 9.30 horas se concentraron ante el edificio de la Audiencia familiares y amigos de la víctima con fotos y una pancarta, y han reclamado que la reanudación del juicio se realice en una sala más grande pues muchos han tenido que quedar fuera dadas las escasas dimensiones.
El fiscal pide para la acusada 24 años de prisión por suplantar presuntamente la identidad de su amiga desde hacía seis años, y asesinarla para cobrar los seguros de vida que había contratado a su nombre tras robarle el DNI y tarjetas de crédito.