La primer edil ha contestado así después de ser preguntada por la aplicación de la futura ordenanza de Convivencia, actualmente en fase de alegaciones. La norma pretende, en palabras de la alcaldesa, que en Madrid "puedan convivir todos, los que trabajan, los que se divierten, los que se levantan temprano, los que circulan, los que van a los parques". Una vez que se apruebe se aplicará "en colaboración con Delegación de Gobierno".
Sobre la prostitución, uno de los aspectos que aborda la futura ordenanza, Botella ha defendido la colaboración institucional para desarticular las bandas que trafican con seres humanos.