El miedo a los contagios por la variante ómicron está llevando a muchas personas a extremar las medidas de seguridad sin renunciar a salir o tomar algo en la calle.
A pesar del frío, las reuniones de amigos que apuestan por la responsabilidad ante los contagios están trasladándose a las terrazas de los bares que se mantienen abiertas en pleno mes de diciembre.
También se mantiene la costumbre de no retirarse las mascarillas solo cuando se bebe o se come algo.
Miedo a contagiar a los familiares en las reuniones de Navidad
Lo que la gran mayoría expresa es que las fiestas de navidad y las reuniones con la familia son un aliciente más para protegerse de la pandemia y proteger al mismo tiempo a sus mayores, mucho más vulnerables.
Los restauradores reconocen que ahora los grupos que van a sus restaurantes son más pequeños y responsables con las medidas de protección anticovid.