"Para hacer algún comentario sobre esa basura de documento", Chávez citó los ideales de soberanía y de construcción de "patria" de próceres independentistas latinoamericanos, que ha tomado como propios para defender su "revolución" socialista.
Advirtió a sus detractores políticos que pueden ir a buscar apoyo y "chillar en el Parlamento Europeo" o "dónde les de la gana", pero que eso no detendrá el avance del proceso de cambios socialistas que dirige.
"No nos importa el Parlamento Europeo o la derecha europea. Aquí somos libres y no nos importa nada", añadió el mandatario, al intervenir en el programa de opinión "Dando y Dando", que transmite diariamente la televisión estatal VTV.
La resolución en la que el PE se solidarizó con los que "sufren la persecución política en Venezuela", simbolizada actualmente por el líder opositor Manuel Rosales, fue respaldada por 29 de los más de 700 diputados de la Eurocámara.
El documento lo redactaron los grupos del Partido Popular Europeo (PPE), los liberales (ALDE) y Unión por la Europa de las Naciones (UEN), de acuerdo con la información oficial.
En la resolución, la Eurocámara manifiesta su "enorme preocupación" por el "deterioro de la situación y la calidad" de la democracia en Venezuela, que se hallaría en "grave riesgo de colapso" debido a la "concentración de poder y al autoritarismo creciente" ejercido por Chávez.
Además, recuerda que, según la Carta Democrática Interamericana de la Organización de Estados Americanos (OEA), en democracia, para acceder al ejercicio del poder, junto a la legitimidad que otorgan las urnas ha de existir igualmente una "legitimidad de ejercicio" en respeto con el Estado de derecho y el adversario político.
Asimismo, el PE pidió a las autoridades venezolanas que encaminen su acción política por la vía del diálogo.
También les solicita que tengan "cabida y representación adecuada en la vida pública las diferentes opciones políticas elegidas y deseadas por la sociedad venezolana", en cumplimiento con la Convención Americana sobre Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
En el debate previo al voto, la eurodiputada española del PPE Pilar Ayuso lamentó que existan en Venezuela "miles de casos" como el de Rosales, alcalde de Maracaibo, procesado por presunta corrupción por la Justicia venezolana y quien se está como asilado político en Perú.
Ayuso añadió que en la resolución también se recuerda a los comisarios de policía Ivan Simonovis, Lázaro Forero y Henry Vivas y a ocho oficiales de la Policía Metropolitana de Caracas, condenados, "sin una sola prueba fehaciente en su contra", a 30 años de prisión.
En cambio, el portugués Pedro Guerreiro, de Izquierda Unitaria Europea, criticó la iniciativa de la Eurocámara, a la que recomendó que "deje de tener la pretensión de que puede dar lecciones al mundo".
Guerreiro defendió que, "a pesar de todos los problemas e injerencias, el pueblo de Venezuela ha demostrado que vale la pena luchar por un país cada vez más democrático y pacífico".
Por su parte, fuentes diplomáticas venezolanas rechazaron "enérgicamente" la resolución, al "desconocer la legalidad" de las acusaciones judiciales contra Rosales, que "incurrió en actos de corrupción", así como los comisarios metropolitanos condenados, contra los que había numerosas pruebas, indicaron.
En su opinión, "la derecha y la extrema derecha del PE pretende convertir a los corruptos en perseguidos políticos".