CiU y ERC han celebrado con normalidad su reunión semanal de seguimiento del pacto de estabilidad pese a las discrepancias sobre los presupuestos que ambas formaciones han evidenciado este lunes tras las respectivas reuniones que han mantenido sus direcciones.
Al encuentro entre CiU y ERC celebrado en el Parlament han asistido el portavoz de CiU en la Cámara, Jordi Turull, la diputada de CiU Mercè Jou, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y el diputado de ERC, Pere Aragonés, este último, uno de los principales responsables de economía del partido.
Al acabar a la reunión, los dirigentes de ambas formaciones han insistido en que el acuerdo de estabilidad no peligra, y que la reunión ha servido para afrontar los principales temas que se abordarán en el pleno que empieza este miércoles.
Los presupuestos, por lo tanto, siguen sin abordarse con concreción, y mientras ERC mantiene que es factible mantener la prórroga presupuestaria si el Estado no modifica el déficit y empieza a pagar las deudas, CiU sostiene que no contempla este escenario porque sería "someterse al yugo" del 0,7 por ciento de déficit.
En relación a los asuntos del pleno de este miércoles, CiU y ERC deben decidir aún si dan el visto bueno a la comisión de investigación sobre la presunta trama de espionaje a políticos, una comisión que impulsa el PP y que necesita de los votos de nacionalistas y republicanos para ver la luz.
CiU y ERC ven difícil apoyarla y argumentan que solo darán su aprobación si se aceptan la comparecencias del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y de los mandos de la UDEF, ya que consideran que el tema tiene un alcance estatal y no sólo catalán.
Republicanos y nacionalistas argumentan que no aceptarán una comisión que aborde solo la derivada catalana del caso, ya que consideran que sería aceptar que es solo una cuestión que afecta a la Generalitat y a los catalanes.
Además, los dos partidos aseguran que no se desentienden del caso, y recuerdan que ya se ha aprobado la comparecencia en la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament del director general de los Servicios Penitenciarios de la Generalitat, Xavier Martorell, para explicar su papel en el caso.