Clinton dice que la presencia de Irán y China en Latinoamérica "es inquietante"

AGENCIA EFE 01/05/2009 16:58

"Si uno mira los progresos, particularmente en América Latina, que Irán y China están haciendo, eso es algo bastante inquietante", señaló Clinton en un encuentro con el personal del servicio exterior de EE.UU. en el Departamento de Estado.

No es la primera vez que el Departamento de Estado expresa su preocupación por el peso cada vez mayor que adquieren Irán, China y también Rusia en América Latina, considerada su tradicional zona de influencia, sobre todo en países que atacaron abiertamente a Washington durante el Gobierno de George W. Bush.

"Ellos están creando vínculos económicos y políticos muy fuertes con muchos de esos líderes. No creo que eso vaya en nuestro interés", explicó ante una pregunta de un funcionario sobre la política de acercamiento del Gobierno de EE.UU. con el presidente venezolano, Hugo Chávez.

Por eso, defendió la estrategia del actual Gobierno de dialogar con los presidentes de América Latina, de escucharlos y tratarlos en igualdad de condiciones sin imponer su agenda en la región.

"Vemos una serie de países y líderes que durante los últimos ocho años han adoptado más y más una postura negativa, adversaria hacia EE.UU., y Chávez es uno de ellos, pero no el único", dijo Clinton.

"La anterior Administración trató de aislarlos, trató de apoyar a la oposición, trató de convertirlos en parias internacionales. No funcionó", indicó la jefa de la diplomacia estadounidense.

El Gobierno del presidente Barack Obama trata de cambiar el enfoque de la política hacia la región, empezando por países como Cuba y Venezuela y siguiendo con otros con los que mantiene relaciones tensas, como Bolivia, Nicaragua y Ecuador.

"Miraremos qué otros enfoques podrían funcionar", dijo Clinton, quien advirtió de que la nueva estrategia no es automáticamente sinónimo de éxito.

"No tenemos garantías de que podamos crear una mejor relación con alguien que tiene un punto de vista diferente de la política, de la economía y de tantas otras cosas, pero consideramos que merece la pena intentar explorarlo y ver qué resultado produce", afirmó.

Recordó que Chávez habló con ella sobre la posibilidad de designar de nuevo a embajadores en sus respectivos países, después de la expulsión del estadounidense Patrick Duddy de Caracas y del venezolano Bernardo Álvarez de Washington.

"Creo que eso lo vamos a hacer en algún momento", señaló Clinton, quien también explicó que EE.UU. está tratando de averiguar cómo tratar con el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y con el mandatario ecuatoriano, Rafael Correa.

"Los iraníes están construyendo una gran embajada en Managua y uno solo puede imaginarse para qué será. Queremos intentar mejorar nuestra relación con (Rafael) Correa y queremos ver si podemos encontrar una manera de mandar de nuevo a un embajador a Bolivia y de trabajar con (el presidente Evo) Morales", señaló.

Morales expulsó en septiembre de La Paz al embajador estadounidense Philip Goldberg, a lo que Washington respondió con la expulsión del boliviano Gustavo Guzmán.

Clinton destacó que EE.UU. afronta un "bloque casi unido" que pide un cambio en la política hacia Cuba.

EE.UU. levantó en abril las restricciones a los viajes familiares y envíos de remesas a Cuba, pero mantiene el embargo.

Washington quiere ver "reciprocidad" del Gobierno cubano acerca de los presos políticos, derechos humanos y otros aspectos, reiteró Clinton.