La decisión ha sido adoptada por la mayoría del PP en la Junta de Portavoces, a propuesta de la presidenta de la Cámara, Elvira Rodríguez y ha contado con los votos en contra del PSOE e IU.
La portavoz socialista, Maru Menéndez, ha anunciado que los miembros de su partido "no asistirán a actos institucionales organizados por Esperanza Aguirre" como muestra de protesta; mientras que la de IU, Inés Sabanés, ha señalado a Aguirre como autora de una "voladura controlada" de la comisión "porque tiene mucho que ocultar". Ambas que han comparecido juntas han denunciado el "atropello democrático" que supone el cierre de la comisión.
Por su parte, el portavoz del PP, David Pérez, visiblemente contento, ha proclamado que los partes de seguimiento " se han demostrado "más falsos que el paraíso comunista", y se ha referido a las portavoces de la oposición como un "dúo unido por el bochorno y la frustración de no haber podido demostrar nada".
Once comparecientes
Con la comparecencia prevista para el miércoles del consejero de Interior, Francisco Granados, habrán sido once los comparecientes que han pasado durante cuatro días por la Comisión de Investigación.
Otras dieciocho comparecencias calificadas por la Mesa de la Asamblea no llegarán a materializarse, entre ellas la que había pedido el PP del vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González, cuyo espionaje considera que es el "único que ha quedado demostrado".
Adoptar sus propias decisiones internas
La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría ha mostrado "el máximo respeto" de su formación a las decisiones de la Cámara regional, "que tiene su propia autonomía y capacidad de decisión". Al mismo tiempo ha subrayado que el PP "siempre" ha mostrado "mucho interés" por "todo lo que dijera en la citada comisión de investigación".
Por ello, la dirigente popular ha insistido en que el principal partido de la oposición esperará a conocer el contenido del dictamen final para adoptar sus propias decisiones internas. EPF