Fiscal pide que se confirmen las penas de prisión impuestas a 4 vecinos de Basauri por pegar fotos de presos

EUROPA PRESS 19/06/2013 11:32

Durante la vista por esta causa celebrada ante la Sala de lo Penal del alto tribunal, el representante del Ministerio Público se ha opuesto a todos los motivos presentados por la defensa de los condenados, entre ellos a la presunta vulneración de la presunción de inocencia alegada en relación con varios carteles aparecidos en la plaza del municipio.

Según el fiscal, fotos similares con la convocatoria de una marcha a favor del acercamiento de presos de ETA fueron ocupados en los domicilios de los encausados.

Por su parte, el abogado de los condenados, todos ellos con edades superiores a los 55 años, ha aludido a una reciente sentencia de esta Sala, del pasado 15 de abril, en la que se señala que reivindicar el acercamiento de presos no es delito porque entra dentro de la libertad de expresión. Los hechos son idénticos a los de este caso, sólo cambian la localidad y los acusados, según la defensa.

La sentencia del alto tribunal sobre este asunto, de la que será ponente el magistrado José Manuel Maza, confirmará las condenas o bien absolverá a Irene Rodero, Serafina Rey, Begoña Garro y Juan López, quienes durante su juicio reconocieron que fijaron fotografías de un único recluso, Txus Martín, aunque pusieron de manifiesto que no sabían que estuvieran haciendo "algo malo o ilegal". Querían denunciar la situación de Martín, encarcelado a pesar de su enfermedad mental.

Según los hechos probados por la Audiencia Nacional, los carteles llevaban inscrito el lema 'Dueños de todos sus derechos, presos a Euskal Herria' e incluían instantáneas de una decena de presos de la banda condenados por delitos terroristas.

Otros de los carteles estaba dedicados en exclusiva a Martín, detenido en el año 2002 en Francia y condenado a un total de 12 años de prisión por sus actividades como integrante del 'comando Vizcaya' durante la década de los 90. Las organizaciones de apoyo a los presos de ETA alegan que padece problemas psicológicos que le llevaron a intentar suicidarse cortándose las venas en septiembre de 2010 cuando permanecía preso en una cárcel de Marsella (Francia).

Los acusados fueron identificados por un testigo protegido que avisó a la Policía. Los cuatro fueron detenidos minutos después mientras colocaban con celo algunos de los carteles.