En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación ha trasladado también el "más sentido pésame" de España a los familiares de las víctimas.
Además, ha retierado el apoyo del Gobierno a las autoridades paquistaníes y al pueblo de Pakistán "en sus esfuerzos por construir una sociedad próspera y en paz, libre de la lacra terrorista que tanto daño causa a la estabilidad del país".
El ataque tuvo lugar en un hotel de la localidad de Gilgit, en la zona de Cachemira administrada por Pakistán, en el norte del país. Un grupo de hombres armados irrumpió en el establecimiento cercano al campamento base de la montaña de Nanga Parbat, en el distrito de Dayamar, un popular destino para el turismo de aventura.