Jordania dice a Israel que la retirada de tierras árabes es la única solución para lograr dos estados

AGENCIA EFE 14/05/2009 15:30

Así se lo dejó claro hoy el rey jordano, Abdalá II, al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en la reunión privada que mantuvieron hoy ambos líderes en la ciudad jordana de Aqaba, en la frontera con Israel.

Netanyahu, que ya había expresado su interés en visitar Jordania, llegó hoy por sorpresa al país vecino, tres días después de que hiciera un viaje parecido a Egipto para reunirse con el presidente Hosni Mubarak.

Egipto y Jordania son los dos únicos países de la región que mantienen relaciones diplomáticas con Israel.

Según un comunicado de la Casa Real jordana, Abdalá II, en su entrevista con Netanyahu, "hizo hincapié en que la solución de los dos estados, que implica la retirada israelí de las tierras ocupadas en la guerra de 1967".

"Israel no obtendrá seguridad y estabilidad si a los palestinos no se les permite el derecho de establecerse en su propio estado y tener una oportunidad de vivir en paz", le dijo el monarca jordano al gobernante israelí, según el comunicado.

Netanyahu está intentando ganar el apoyo de los líderes moderados de la región, pero se resiste a aceptar la idea de la creación de un Estado palestino, la principal demanda que le plantean a Israel los gobernantes árabes.

En cambio, el primer ministro se inclina a favor de fomentar la cooperación entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para conseguir una "paz económica", una opción que no parece suficiente para líderes regionales, como el monarca jordano.

"Cualquier conversación sobre fortalecimiento económico al margen del marco de una solución política que lleve al establecimiento de un Estado independiente y viable (...) será rechazada porque no aporta la paz y expone a la región a nuevos conflictos y crisis", dijo el rey Abdalá a Netanyahu, según el comunicado de la Casa Real.

La nota agrega que el rey Abdalá también pidió a Netanyahu que detenga todos los asentamientos y cualquier cambio que altere la configuración geográfica del territorio, y le emplazó a iniciar conversaciones con la ANP.

También le pidió detener "el vaciado de la población cristiana y musulmana de la ciudad santa" de Jerusalén.

No hubo posibilidad de obtener declaraciones directas de los dos líderes tras su reunión de hoy. En el viaje que hizo Netanyahu a Egipto el lunes pasado, el primer ministro israelí compareció al lado de Mubarak para hacer una declaración ante los periodistas, pero tampoco se permitieron preguntas.

El viaje de Netanyahu a Jordania forma parte de una frenética actividad diplomática en la región en los últimos días ligada, al parecer, a varias entrevistas que en los próximos días mantendrá en Washington el presidente estadounidense, Barack Obama.

El 18 de mayo Obama se reunirá con Netanyahu, y el 26 ó 27 de mayo hará lo mismo con Mubarak. El rey jordano fue el primer líder árabe que fue recibido por Obama en la Casa Blanca, el pasado 21 de abril.

En esa cita, Abdalá II insistió en la necesidad de respaldar la iniciativa de paz árabe que fue aprobada por la Liga Árabe el 28 de marzo de 2002 y que contempla la retirada israelí de los territorios ocupados, incluyendo Jerusalén este, a cambio del reconocimiento por parte de los países árabes de Israel.

Como parte de la actividad diplomática regional, el rey jordano se reunió el pasado lunes en Damasco con el presidente sirio, Bachar al Asad, y en Damasco se encuentra hoy también el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás.

El pasado lunes, en una entrevista que difundió el diario británico "The Times", Abdalá II alertó sobre la posibilidad de que estalle un conflicto regional si se retrasan las negociaciones de paz en Oriente Medio.

"Si retrasamos nuestras negociaciones de paz, va a haber otro conflicto entre árabes o musulmanes con Israel en los próximos doce o dieciocho meses", afirmó el rey jordano.

El monarca coincidió con analistas regionales en el sentido de que la reunión que mantendrán Obama y Netanhayu será clave para el futuro de las negociaciones de paz en la región.

"Todos los ojos estarán pendientes de lo que pase en Washington en mayo. Si no hay señales claras para todos nosotros, se generará un sentimiento de que será otro gobierno estadounidense que nos defraudar", agregó Abdalá.